Foto: Gobierno de México
En conferencia matutina del 28 de marzo de 2022, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO) informó sobre el futuro del avión presidencial. Aseguró, el aeroplano no se puede vender pues está hecho a medida y con lujos.
La determinación del gobierno ante la dificultad de conseguir comprador para el avión ha sido no modificarlo y rentarlo para eventos. La administración de este, según dijo AMLO correrá a cargo de alguna aerolínea o, en todo caso, de la empresa militar mexicana Olmeca-Maya-Mexica. Esta última, es la misma que operará el Tren Maya y los Aeropuertos de Tulum, Chetumal, Palenque, y el recién inaugurado Felipe Ángeles.
Obrador, compartió, la decisión de rentar la aeronave se toma tras la dificultad para ponerla a la venta debido a sus características. Además no puede ser utilizado para viajes comerciales pues de 240 asientos solo cuenta con 80 sillas. Sumado a esto, compartió, debido a los materiales con los que está hecho, sería imposible y costoso reconvertirlo a su originalidad.
Con la medida de rentar el avión, se espera no esté detenido y genere ingresos para el pago de gastos de su propio mantenimiento. La aeronave, que permanecerá en Santa Lucía, será rentada para viajes largos, entre los cuales AMLO propuso bodas, quince años o por empresas que quieran reconocer a sus empleados.
Aseguró el mandatario, no son compradores lo que hace falta, no obstante, los interesados quieren pagar un precio menor, ante lo cual manifestó "eso no es posible". Afirmó, la aeronave se tiene que vender a su precio de avalúo y no va a rematarse, incluso, remarcó se hizo un convenio con la Organización de las Naciones Unidas (ONU). La Organización por su parte, a través del Marketplace Global de las Naciones Unidas anunció la venta el Boeing 787-8 Dreamliner.
Manifestó, utilizarlo es una experiencia de gala, pues es muy lujoso y "es un avión de primera con 10 lugares exclusivos". Aunque advirtió, si sale algún comprador aún con el anuncio de disponer del aeroplano para su renta, se venderá.
Por su parte, la rifa simbólica del avión presidencial significaría un ingreso para las instituciones ganadoras. Sin embargo, ha habido polémica por irregularidades en la entrega y uso del dinero de los premios.
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