Ciudad de México,
Juan Manuel Flores
Crédito foto: Gustavo Torres (NotiPress)
En su reciente reporte de industria ecommerce, BlackSip destaca que la ralentización económica que experimenta Latinoamérica repercute directamente en los sectores de retail y comercio electrónico. Pese a ello, el ecommerce en la región presentó un crecimiento del 14.3% y se prevé que, en 2024, las ventas en línea alcancen ingresos por 1 mil millones de dólares. De tal forma, entre 2024 y 2027 el crecimiento en la región será discreto pero sostenido.
Si bien, como evidencia el reporte de BlackSip, diversos países en Latinoamérica han consolidado un mercado sólido en el ámbito online, a nivel regional, la industria enfrenta una serie de desafíos que han obstaculizado la expansión sostenida y provocado que algunos países se queden rezagados. El reporte BlackStats 2024 establece que los principales retos a los cuales se enfrenta el ecommerce en la región están vinculados con la logística e infraestructura.
Dado que la puntualidad y velocidad de entrega se encuentran en el núcleo de las decisiones de compra de los consumidores, la infraestructura de transporte es un pilar esencial en el ecommerce. En el caso de Latinoamérica, la eficacia del comercio electrónico está ligada a la calidad del transporte terrestre, que, al ser deficiente, ha generado desconfianza en los consumidores con respecto a esta industria.
Según Data Reportal, los compradores online consideran una serie de factores en su decisión de compra. Los cinco principales son entrega gratuita, cupones y descuentos, política de devolución sencilla, reseñas de clientes y entrega el mismo día. Sin embargo, como destaca BlackSip, en la región pocos jugadores cuentan con la infraestructura para cubrir dichos requerimientos.
Aunado a ello, la congestión vehicular también complica la logística de entrega rápida, aún más en lugares como Colombia, México y Perú, donde la falta de infraestructura vial idónea ha provocado que estos sean los países con mayor congestión de tráfico en Latinoamérica. Como solución a ello, un estudio del Banco Interamericano de Desarrollo sugiere que invertir 100 millones de dólares en infraestructura podría disminuir la congestión de tráfico hasta en un 10%.
En el mismo sentido, BlackSip considera que esto también ofrecería el potencial de transformar de manera significativa la gestión logística del ecommerce. Sin embargo, dado el considerable rezago de la región en la inversión de infraestructura vial, esto se vuelve una realidad lejana. En México se invierte menos del 3% del PIB en infraestructura vial, mientras en Asia Oriental, las naciones invierten en promedio el 8%. En consonancia con ello, BlackSip destaca que la falta de infraestructura adecuada de transporte está ligada al bajo volumen de exportaciones intraregionales en Latinoamérica.
De acuerdo con las estimaciones de la consultora, este tipo de transacciones solo representa el 14%. Considerando que la mayor parte de los países en la región comparten el mismo idioma, es sumamente bajo. Así, se argumenta que el impulso de la homogeneidad lingüística del comercio transfronterizo se ve mermado por la falta de infraestructura de transporte. Para la consultora, la infraestructura de transporte integrada y eficiente no solo es un factor clave para superar las barreras de comercio y robustecer las capacidades del mercado digital, sino también para fomentar el intercambio cultural y el desarrollo económico.
Tomando ello en cuenta, BlackSip destaca la importancia de que los países reconozcan las implicaciones de estas inversiones en servicios como el delivery. Esto permitirá satisfacer las necesidades de infraestructura de cara a la población, en paralelo con el desarrollo de diversas industrias. Así, al mejorar las deficiencias en la infraestructura vial, el ecommerce podría beneficiarse en Latinoamérica.