Foto: Profepa
La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) anunció la clausura de cuatro aserraderos ilegales en la localidad de Santa Lucía, Ocuilan, Estado de México. Estos operativos, realizados los días 14, 15, 16 y 20 de noviembre, forman parte de los esfuerzos para combatir la extracción ilegal de madera en el Bosque de Agua, una región clave que abarca partes de la Ciudad de México, el Estado de México y Morelos.
En las inspecciones, se decomisaron 201.379 metros cúbicos de madera de oyamel en rollo y ya procesada, así como maquinarias de aserrío. Las instalaciones, que operaban sin autorización, almacenaban madera de origen ilícito. Los bienes asegurados fueron trasladados a instalaciones de la SEMARNAT e ICAMEX en Toluca y Metepec.
Los operativos contaron con la participación de 498 elementos de diversas instituciones, incluidas la Profepa, la Semarnat, la Sedena, la Guardia Nacional, la FGR y la CNDH, además de autoridades estatales y municipales.
El Bosque de Agua es una región vital para el centro del país, ya que proporciona servicios ambientales esenciales como la recarga de mantos acuíferos, generación de oxígeno, regulación térmica y captura de carbono. Sin embargo, enfrenta crecientes amenazas debido a la tala ilegal y el cambio de uso de suelo.
La procuradora Mariana Boy destacó la importancia de estos operativos como parte de un esfuerzo coordinado entre los gobiernos de Morelos, Edomex y CDMX para proteger esta región. "Dar una atención integral a este territorio es una tarea en la que participamos coordinadamente", señaló.
Este tipo de acciones refuerzan el compromiso de las autoridades en la lucha contra la tala ilegal y la preservación de los bosques, fundamentales para la sustentabilidad ambiental del país.
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