Propósitos de Año Nuevo: ¿Cómo establecer metas alcanzables?

Con la llegada del Año Nuevo, surge la tradición de plantearse propósitos para mejorar diversos aspectos de la vida. Desde aprender nuevas habilidades hasta ahorrar para alcanzar metas personales, estos objetivos suelen reflejar deseos de cambio y progreso. Sin embargo, la mayoría de las resoluciones se quedan en intenciones que nunca se materializan. Para evitarlo, BBVA presenta cinco estrategias efectivas para convertir los propósitos en logros reales.

Escribir tus metas: el primer compromiso

Escribir una lista con todos los propósitos es el primer paso para convertir las ideas en acciones. Según expertos en psicología, este acto genera un compromiso más fuerte con las metas, ayudando a visualizarlas y priorizarlas. Se debe detallar objetivos específicos, como ahorrar una cantidad mensual, aprender a tocar un instrumento o hacer ejercicio tres veces a la semana. El simple acto de escribir las metas es poderoso porque refuerza la intención y permite reflexionar sobre los pasos necesarios para alcanzarlas.

Definir objetivos realistas con el método SMART

Para asegurar el cumplimiento de los propósitos, es necesarios que sean claros, alcanzables y medibles. Aquí es donde entra el modelo SMART:

S (Specific - Específico): Define tus metas con detalle. Por ejemplo, en lugar de "ahorrar dinero", plantea "ahorrar $500 cada mes". M (Measurable - Medible): Incluye indicadores que te permitan evaluar tu progreso, como cantidades, porcentajes o fechas límite. A (Achievable - Alcanzable): Asegúrate de que tu meta sea realista y esté dentro de tus posibilidades actuales. R (Realistic - Realista): Considera tus recursos y circunstancias al establecer tus metas. T (Time-bound - Tiempo): Fija un plazo para cumplir cada objetivo; esto te ayudará a mantenerte enfocado y organizado.

Este enfoque práctico permitirá dividir los propósitos en pasos concretos para abordarlos de manera gradual.

Establecer fechas claves

Asociar tus metas a un calendario específico es esencial para medir avances y mantenerse motivado. Si el propósito es redecorar el hogar, por ejemplo, se debe fijar un plazo para completar cada etapa: ahorrar una cantidad específica en los primeros tres meses y elegir materiales o contratar servicios en los meses siguientes. Contar con un cronograma no solo ayuda a visualizar el progreso, sino que también refuerza el compromiso con las fechas y las acciones planificadas.

Diseñar un plan para alcanzar tus metas

Todo propósito necesita un plan de acción. Sin un camino definido, es fácil perder el rumbo. Por ejemplo, si la meta es viajar, se debe analizar los ingresos y gastos para determinar cuánto hay que ahorrar cada mes. También considerar opciones como promociones de agencias de viajes o financiamiento a través de préstamos personales.

Registrar progresos y compartir tus metas

Llevar un registro de los avances puede ser un gran motivador. Hacer público el compromiso añade un nivel extra de responsabilidad, ya que otras personas estarán al tanto de tu progreso.

Cumplir los propósitos de Año Nuevo requiere más que buenos deseos; es necesario contar con un enfoque estructurado. Escribir metas, diseñar un plan realista con objetivos SMART, establecer fechas clave y registrar progresos permitirá mantenerse enfocado y motivado para garantizar un éxito a largo plazo.