Foto: @arturhd en Twitter
La tarde noche del 9 de diciembre de 2022 en redes sociales se destacaron los trending topics de Ticketmaster, Bad Bunny y Estadio Azteca. Aunque era algo de esperarse por la presentación del artista más escuchado en Spotify, los motivos no fueron los mejores. Pues se reportaron fraudes, boletos clonados, cierres de puertas para entrar al estadio y demás quejas con los organizadores. Tanto la boletera, como el inmueble y la PROFECO que se manifestaron al respecto.
Fans indicaron que, pese a haber comprado sus boletos en la plataforma oficial de Ticketmaster, los pases de entrada aparecían duplicados y no válidos. Otros indicaban que a un par de horas de iniciar la presentación de Bad Bunny, las puertas ya estaban cerradas, dejando a miles de personas fuera del inmueble. El primero en lanzar un comunicado fue el Estadio Azteca.
La sede indicó que "se detectaron por parte de elementos de Ticketmaster casos de duplicacióny/o falsificación de boletos para el concierto de esta noche, situación que es totalmente ajena al Estadio Azteca". Asimismo, se indicó que se recurriría a personal de seguridad privada y de la SSPC. Aquí se pidió un informe de lo ocurrido a la boletera.
Ricardo Sheffield, titular de la PROFECO comunicó que se solicitó el informe y se invitó a formalizar las quejas para atenderlas en términos de la ley. Cabe destacar que, antes del incidente, ya había una convocatoria para acción colectiva en contra de Ticketmaster. Los motivos son cancelación de cualquier evento y negativa de reembolso.
Finalmente, Ticketmaster lanzó un comunicado en el que se ofrecen disculpas a los fans y se anuncia el reembolso de boletos legítimos. "Los inconvenientes en los accesos fueron consecuencia de la presentación de un número sin precedente de boletos falsos", aseguran. Confirmaron que se trabaja con PROFECO para clarificar los hechos, atender y dar respuesta a los consumidores afectados.
Esta situación se suma a los encarecimientos de boletos para conciertos o festivales en México. Por ejemplo, en la edición del Vive Latino en 2022, una persona, con salario mínimo mexicano, debía destinar 2.1 de su salario para cubrir el importe del acceso. Mientras que en el caso de la edición de 2022, se destinó entre cinco y 10 días de salario.
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