La responsabilidad compartida es clave para la seguridad fronteriza de México-EEUU

Con el inicio de la segunda administración del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, la geopolítica en América Latina y el Caribe se encuentra en proceso de transformaciones en materia de seguridad. Tras la designación de México como zona de emergencia por el narcotráfico, voceros de políticas de gobierno para El Colegio de la Frontera Norte destacaron la necesidad de tener una responsabilidad compartida.

Durante el webinar titulado "Relaciones México-Estados Unidos, seguridad y defensa en la segunda administración de Donald Trump", expertos convocados por la Escuela Schar de Política y Gobierno hablaron sobre el futuro de la seguridad fronteriza. Celina Realuyo, profesora en el Centro de Estudios de Defensa Hemisférica William J. Perry, señaló que las políticas de relaciones exteriores de Trump son similares a las adoptadas durante su primer mandato.

La profesora reveló que la narrativa de seguridad nacional respaldada por las fuerzas armadas de México y Estados Unidos es la prioridad para el republicano. Entre las medidas de la administración Trump-Vince se encuentran el proteccionismo con fortalecimiento del Ejército de Estados Unidos a través de 12 acciones presidenciales. Con base en la Ley de Enemigos Extranjeros, el mandatario estadounidense será capaz de expulsar y colocar delitos de pena de muerte para las personas migrantes con presuntos nexos con los carteles.

A diferencia de las medidas impulsadas por su predecesor, el expresidente Joe Biden, Trump designará a los grupos del narcotráfico como terroristas. Bajo esta línea, existe una tensión respecto a las presiones administrativas y la criminalización de los migrantes no autorizados en territorio estadounidense.

De acuerdo con Mark Rozell, decano de la Escuela Schar de Políticas y Gobierno en la Universidad George Mason, las políticas de responsabilidad compartida son clave para trabajar en términos de seguridad. A través de la cooperación entre autoridades de México y Estados Unidos, la postura del gobierno republicano podría tomar una actitud menos punitiva hacia la presidencia mexicana.

Para el decano estadounidense, el escenario de México en los próximos 4 años de administración del presidente Trump representa tanto un caso pesimista, como optimista. En el webinar al que contó acceso el equipo de NotiPress, Rozell reveló que Estados Unidos no aborda la posibilidad de trabajar en conjunto con autoridades mexicanas.

No obstante, subrayó que el gobierno de la 4T en México no suscribirá la consigna del expresidente Andrés Manuel López Obrador: abrazos, no balazos. Asimismo, informó que el concepto de responsabilidad compartida en la política es utilizado por figuras como Omar García Harfuch, secretario de Seguridad y Protección Ciudadana en el gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum. Con la participación de diversas secretarías relacionadas con la seguridad nacional, el funcionario reiteró el compromiso con disminuir la violencia el pasado 10 de diciembre.