
Foto: Gobierno de México
La estrategia para atender el compromiso bilateral de entrega de agua a Estados Unidos bajo el Tratado de 1944 fue abordada nuevamente este lunes 22 de diciembre en Palacio Nacional. De acuerdo con lo expuesto, el gobierno federal implementará un esquema técnico acordado con gobernadores del norte del país y la utilización de recursos hídricos provenientes de cuencas distintas a las originalmente previstas.
En la conferencia matutina, la presidenta Claudia Sheinbaum afirmó que las autoridades locales participaron en las decisiones más recientes. "Se trabajó con todos los gobernadores y se buscó un esquema de afectación mínima a agricultores de todo el país, particularmente de los estados de Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas".
Durante la intervención, también se detalló una medida adicional: el uso de volúmenes almacenados en otras regiones del país. Esta acción, según lo explicado, busca cubrir el volumen pendiente sin impactar los sistemas de riego regionales ni el consumo de las zonas urbanas involucradas.
Una de las medidas mencionadas fue la reactivación de un proyecto de conducción de agua tratada desde el estado de Nuevo León hacia tierras agrícolas de Tamaulipas. Según el anuncio, este plan retomará un diseño elaborado años atrás y su ejecución comenzará durante el siguiente año calendario. "Estamos recuperando este proyecto para que Tamaulipas pueda tener suficiente agua para riego", dijo Sheinbaum durante la sesión.
Los ajustes operativos se encuentran relacionados con la cláusula del artículo 4 del tratado internacional firmado en 1944, el cual permite reorganizar las entregas cuando existen condiciones climáticas extraordinarias, como las registradas en 2022 y 2023. Ambas secciones de la Comisión Internacional de Límites y Aguas (CILA) sostuvieron reuniones a lo largo del año para validar esas condiciones y acordar la metodología de recuperación del volumen pendiente.
A diferencia de lo discutido el 15 de diciembre, la sesión de este lunes incluyó información sobre la estrategia de riego eficiente aplicada en distritos agrícolas del norte. La presidenta comentó que se impulsa la sustitución de cultivos con alto consumo hídrico y la tecnificación en parcelas para reducir el uso de agua. "Incluso se están haciendo sustitución de cultivos que utilizan menos agua, trabajando directamente con los agricultores", indicó.
La distribución de agua durante el próximo ciclo seguirá bajo monitoreo de la CILA, en coordinación con las entidades federativas involucradas. Las autoridades no informaron sobre nuevos volúmenes, pero reiteraron que todas las acciones respetan los límites del acuerdo binacional y las necesidades locales de abasto.
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