Ciudad de México,
Judith Moreno
Crédito foto: Gobierno de México
México no emitirá posicionamiento directo ante la carta enviada por el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, a los gobiernos de América Latina. Así lo indicó este 23 de diciembre la presidenta Claudia Sheinbaum durante la conferencia matutina realizada en Palacio Nacional.
La misiva, divulgada un día antes, denuncia lo que el mandatario venezolano calificó como una "escalada de agresiones" por parte del gobierno de Estados Unidos, incluyendo las operaciones militares en el Caribe, incautaciones de petróleo, y presuntas ejecuciones extrajudiciales. Maduro instó a los gobiernos de la región y a los países miembros de la Organización de Naciones Unidas (ONU) a condenar estos actos y activar mecanismos multilaterales para su investigación.
Consultada sobre el documento, la presidenta informó que no ha tenido acceso directo al texto. "No sé si llegó a Relaciones Exteriores, todavía no la recibo yo personalmente", afirmó durante la sesión de preguntas con medios acreditados.
En relación con el contenido del llamado, Sheinbaum reiteró los principios a través de los que se guía la política exterior del México desde la segunda mitad del siglo XX. "Nuestra política exterior (...) no intervención, no injerencia, solución pacífica de los conflictos. Esa siempre va a ser nuestra posición, lo hemos dicho con mucha contundencia y la vamos a defender siempre", expresó.
Además, la mandataria confirmó que México participará en una sesión del Consejo de Seguridad de la ONU, donde podría tratarse el tema expuesto por Venezuela. En este encuentro, el embajador Héctor Vasconcelos será quien represente la postura del país. "Va a hacer su participación de manera muy firme de lo que piensa siempre México", indicó.
La carta de Maduro también hace referencia a tratados como el Tratado de Tlatelolco y la declaración de América Latina y el Caribe como zona de paz, firmada bajo el marco de la CELAC en 2014. Caracas sostiene que las acciones de Washington vulneran principios internacionales, al tiempo que acusa una amenaza regional más allá del caso venezolano.
Ante ese contexto, la posición mexicana reiterada por Sheinbaum no incluyó juicios respecto a las acusaciones ni valoraciones en torno a actores involucrados. Tampoco se anunció contacto bilateral con Caracas ni con otros países del continente sobre este asunto específico.