Ciudad de México,
Redacción NotiPress
Crédito foto: Gustavo Torres (NotiPress)
México entregará a Estados Unidos un volumen de 249 millones de metros cúbicos (Mm³) de agua como parte del pacto alcanzado el 12 de diciembre de 2025, en cumplimiento del Tratado de Aguas firmado en 1944. Según el gobierno Federal, la entrega no compromete el abasto interno ni el uso agrícola, y se realiza con base en las previsiones legales ante condiciones de sequía.
La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) afirmó que el artículo 4 del Tratado establece un esquema de ciclos quinquenales, lo cual permite reponer faltantes en periodos posteriores cuando se presentan sequías extraordinarias. En este caso, México dispone del ciclo 2025-2030 para cubrir la diferencia correspondiente al periodo anterior, afectado por condiciones climáticas severas en la cuenca del Río Bravo.
El volumen liberado fue posible gracias a las precipitaciones registradas en meses recientes y a la capacidad de infraestructura operativa, asegurando que no se rebase lo estipulado por el acuerdo internacional ni se afecte el suministro en zonas fronterizas. La planeación de entregas para el actual ciclo se definirá en conjunto con Estados Unidos antes del 31 de enero de 2026.
En paralelo, el 15 de diciembre entró en vigor el acta 333 de la Comisión Internacional de Límites y Aguas (CILA), firmada por ambos gobiernos en Tijuana, Baja California. Este documento, titulado "Acciones integrales para abordar el problema de saneamiento fronterizo en Tijuana, Baja California – San Diego, California", establece una ruta conjunta de atención estructural a la problemática sanitaria en la región.
Así, el acuerdo contempla obras concretas de tratamiento y control de sedimentos, así como la elaboración de un plan maestro hídrico con estudios técnicos que permitan anticipar el crecimiento urbano y prevenir futuras crisis sanitarias. Estados Unidos asumirá corresponsabilidad financiera a través del Banco de Desarrollo de América del Norte (BDAN) para asegurar la operación de la infraestructura del lado mexicano.
Ambos acuerdos reflejan mecanismos paralelos de cooperación entre México y Estados Unidos en materia de agua. Mientras el Tratado de 1944 regula la entrega de volúmenes desde cuencas mexicanas, el acta 333 establece acciones conjuntas para atender problemas de infraestructura y saneamiento en zonas fronterizas. En ambos casos, la coordinación bilateral busca dar cumplimiento a compromisos legales y operativos sin comprometer el suministro nacional.