Vapeadores en México: mitos y realidades sobre su seguridad en el consumo

Durante la conferencia matutina del 13 de diciembre, la titular de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), Armida Zúñiga Estrada, reveló que los vapeadores en México no cumplen con los estándares internacionales de seguridad. A pesar del presunto bajo riesgo para la salud de los vapeadores que informan las empresas con ventas en México, Cofepris reveló más de 30 sustancias dañinas en estos productos.

Mito 1: los vapeadores representan un menor riesgo para la salud comparados con los cigarros de tabaco

La documentación del Gobierno de México consultada por NotiPress informó que los vapeadores en México colocan tres ingredientes en la etiqueta de sus productos. En primer lugar, se encuentra la glicerina empleada en una gran variedad de fármacos y cosméticos; luego, el propilenglicol, para crear humo artificial; y finalmente, los saborizantes naturales y artificiales.

Según el portal de EcigMex, investigaciones en Estados Unidos respaldan que los riesgos por el consumo de vapeadores no son un problema de salud pública. Para la marca de los cigarrillos electrónicos, al usar calentamiento y vapor en estos dispositivos, los vapeadores no emiten monóxido de carbono, considerados sustancias cancerígenas.

No obstante, la combustión del cigarrillo de tabaco convencional no es el único factor a considerar en materia de salud. Cofepris informó que entre las 30 sustancias no declaradas en el etiquetado de los dispositivos electrónicos, se encuentran ingredientes tóxicos, tales como:

Acroleína, sustancia para sintetizar otros productos químicos; entre sus efectos sobre la salud se encuenta la disminución de frecuencia cardiaca

Dimetil éter, empleado como disolvente en productos de limpieza; irrita el el tracto respiratorio y altera el sistema nervioso central

Benceno, usado como solvente y en la manufactura de productos plásticos; se considera carcinógeno y afecta al sistema nervioso

Aunado a ello, autoridades sanitarias confirmaron que el calentamiento y mezcla de líquidos electrónicos en el vapeador genera nuevas sustancia nocivas. Ello se debe a las interacciones entre la glicerina y propilenglicol, responsables de formar acetaldehído, un carcinógeno del grupo 1.

Mito 2: los vapeadores no generan adicción

De acuerdo con Centro Médico ABC, los vapeadores son dispositivos electrónicos diseñados para simular el consumo de un cigarrillo a través del calentamiento de líquidos que contienen nicotina y saborizantes. Si bien las marcas venden estos productos como una alternativa menos adictiva que los cigarros de tabaco, su consumo puede generar adicción desde la primera o segunda ingesta, informó el neumólogo de ABC, José Padua García.

Respecto a los compuestos nocivos generados con la mezcla de líquidos en los vapeadores, el acetaldehído es responsable de incrementar los efectos adictivos de la nicotina. Según el Instituto Nacional de Medio Ambiente y Salud Pública de Países Bajos, los efectos de esta sustancia en el cerebro incremental la dependencia de los hábitos relacionados al consumo de tabaco.