Buenos Aires,
Sergio F Cara
Crédito foto: Sergio F Cara (NotiPress/Composición)
Después del exabrupto del presidente argentino Javier Milei en una entrevista con Patricia Janiot donde llamó "comunista asesino" a Gustavo Petro, ahora el Gobierno modera las declaraciones. El 27 de enero, la Cancillería, liderada por Diana Mondino, externó preocupación mediante un escueto comunicado por el proceso democrático de Venezuela.
"El Gobierno argentino sigue con preocupación la situación política en Venezuela y lamenta la decisión de inhabilitar para el ejercicio de funciones públicas a la principal líder de la oposición y ganadora de las primarias, María Corina Machado", se lee en el comunicado de la Cancillería argentina
Asimismo, la Cancillería expresó, "Argentina reafirma su compromiso en defensa de la libertad, la democracia y los derechos humanos y espera la pronta celebración de elecciones presidenciales democráticas, transparentes, con participación plena de todos los candidatos políticos y con presencia de observación electoral externa".
Otros presidentes latinoamericanos se pronunciaron contra el entonces presidente electo, Javier Milei. Tanto Lula, López Obrador y Maduro, había tirado en contra del libertario. Maduró llamó "neonazi" en ese momento al presidente electo argentino.
Esto ocurre a pocos días en la que el presidente Javier Milei respondió que Gustavo Petro era un "comunista asesino" y que estaba hundiendo a Colombia. Este exabrupto produjo un llamado a consulta al embajador colombiano en Argentina, Camilo Romero, por parte del gobierno colombiano. Si bien el escalamiento diplomático quedó allí, motivos no le faltan al Gobierno argentino para despotricar contra el líder Nicolás Maduro, quien calificó de error al presidente argentino Javier Milei. La estrategia con Venezuela parece tener más diplomacia que la habitual "verdad" del presidente Milei, tal como lo calificó el vocero presidencial, Manuel Adorni.