Ciudad de Buenos Aires,
Martín Olivera
Crédito foto: CONICET
Un grupo de paleontólogos internacionales, con participación de científicos del CONICET y la Universidad de Cambridge, reveló un hallazgo excepcional en Brasil. En el yacimiento José Martin Suárez, ubicado en Presidente Prudente, San Pablo, se encontró un cráneo completo de un ave fósil del Mesozoico, Navaornis hestiae. Este fósil, de aproximadamente 80 millones de años, pertenece al grupo de las enantiornites, aves del Cretácico Superior. La preservación tridimensional del fósil permite observar detalles anatómicos fundamentales para comprender la evolución de las aves modernas.
El hallazgo de Navaornis hestiae destaca por su excelente estado de conservación, especialmente en su cráneo y cerebro. A diferencia de otros fósiles de aves mesozoicas, frecuentemente hallados aplanados y fragmentados, el cráneo de Navaornis fue preservado en 3D. Esto permitió realizar una reconstrucción detallada del cerebro, oído interno y otras estructuras craneales. Según Agustín Martinelli, paleontólogo del CONICET, este fósil "llena un vacío evolutivo entre las primeras aves y las aves modernas", facilitando el estudio de detalles sobre esta transición.
Dicho estudio, publicado en la revista Nature, describe cómo el cerebro de Navaornis combina rasgos primitivos y avanzados, con una estructura intermedia entre especies antiguas y actuales. Guillermo Navalón, coautor de la investigación e investigador en Cambridge, explicó que la estructura cerebral de Navaornis representa un "momento único en el que la pieza faltante encajó a la perfección". Esto proporciona un vínculo directo entre la anatomía de los dinosaurios alados y las aves actuales.
Los científicos detallaron que el cráneo de Navaornis comparte similitudes con las aves actuales, aunque presenta un desarrollo cerebral intermedio. Luis Chiappe, director del Museo de Historia Natural del Condado de Los Ángeles y líder del estudio, indicó que este fósil aporta "aspectos esenciales sobre la evolución del cerebro en aves". También muestra cómo las aves mesozoicas adquirieron, de forma convergente, características compartidas con aves actuales, pese a no sobrevivir la extinción al final del Mesozoico.
Esta conservación del fósil en la cantera de Presidente Prudente, un yacimiento compacto de seis metros cuadrados, permitió preservar cientos de restos de aves enantiornites en 3D. Esta localidad brasileña ofrece una "instantánea" de la avifauna mesozoica, única en la paleontología. Hasta la fecha, se encontraron múltiples restos tridimensionales de enantiornites en esta zona, pero el cráneo completo de Navaornis hestiae se destaca como uno de los fósiles de aves mejor conservados de la era Mesozoica.
Cabe destacar que el descubrimiento de Navaornis hestiae en Brasil ofrece información detallada sobre la anatomía de aves mesozoicas, brindando datos específicos de la morfología craneal y cerebral de especies antiguas. Según los investigadores, este fósil permite explorar más a fondo la transición entre aves primitivas y modernas, ampliando el campo para futuros estudios sobre la diversidad y adaptaciones de las enantiornites en esa era.