El nuevo código de IA europeo genera fricción con las empresas tecnológicas

Meta critica las nuevas directrices voluntarias por generar incertidumbre y limitar la innovación en modelos de inteligencia artificial

Meta se niega a firmar el código de IA de la UE al considerar que impone barreras a la innovación y excede lo establecido por la ley

Una nueva controversia marca el avance regulatorio de la inteligencia artificial en Europa. A pocas semanas de que entren en vigor las reglas para proveedores de modelos de IA de propósito general, la tecnológica Meta rechazó adherirse al código de prácticas publicado por la Comisión Europea. La empresa argumentó que el documento impone requisitos que exceden la legislación vigente y genera inseguridad jurídica para desarrolladores.

Desde el 2 de agosto de 2025, la Ley de Inteligencia Artificial de la Unión Europea exigirá que proveedores de modelos con riesgo sistémico, como OpenAI, Google, Anthropic y Meta, cumplan obligaciones de registro, documentación y gestión de riesgos. Para los modelos ya en operación, el cumplimiento será obligatorio antes de agosto de 2027.

Tal código voluntario, presentado por la Comisión a inicios de julio, busca facilitar la adaptación empresarial a la nueva regulación. Establece obligaciones como actualizar documentación técnica, evitar el uso de contenido pirateado y respetar solicitudes de exclusión de obras protegidas por derechos de autor.

En LinkedIn, Joel Kaplan, jefe de asuntos globales de Meta, afirmó que "Europa se dirige por el camino equivocado en materia de IA". Indicó que no firmarán el código porque "introduce una serie de incertidumbres legales para los desarrolladores de modelos, así como medidas que van mucho más allá del alcance de la Ley de IA".

También advirtió que la regulación "sofocará el desarrollo y despliegue de modelos de frontera en Europa, y obstaculizará a las empresas europeas que buscan construir negocios sobre estos sistemas". Las declaraciones reflejan una posición firme contra lo que consideran un exceso normativo en la región.

Pese a las objeciones de varias compañías tecnológicas y fondos de inversión, la Comisión Europea aseguró que no modificará su calendario. El reglamento forma parte de una estrategia más amplia para enfrentar los riesgos de la IA generativa y garantizar un uso responsable dentro del mercado europeo.