Inflación al alza coloca a Banxico en el centro de la atención

Peso mexicano retrocede mientras Banxico prepara decisión de política monetaria

Con la inflación en 3,74 % y un peso mexicano debilitado frente al dólar, los mercados siguen atentos la próxima decisión del Banco de México

Los inversionistas concentran la atención en la reunión del Banco de México, prevista para este jueves 25 de septiembre, debido al repunte inflacionario y la reciente fortaleza del dólar tras las declaraciones de Jerome Powell. El presidente de la Reserva Federal mantuvo una postura cautelosa sobre mayores flexibilizaciones, lo cual impulsó la demanda por dólares en los mercados internacionales y debilitó a divisas emergentes, incluido el peso mexicano.

En el ámbito local, el dato más relevante fue el índice nacional de precios al consumidor correspondiente a la primera quincena de septiembre. Las cifras mostraron un incremento de la inflación general hasta 3,74% interanual, acompañado por un núcleo con comportamiento rígido. Según Felipe Barragán, estratega de investigación de mercados en Pepperstone, esta dinámica ubica la inflación en la parte alta del rango de tolerancia de Banxico y recuerda a los participantes financieros que el proceso desinflacionario no siempre avanza en línea recta.

Así, el consenso de analistas anticipa una reducción de 25 puntos base en la tasa de referencia, situándola en 7,50%. Sin embargo, las expectativas no descansan únicamente en el ajuste, pues lo fundamental será la comunicación posterior del banco central. Barragán advirtió que la cita será considerada por los mercados tanto un evento de comunicación como un encuentro de política monetaria, debido a la relevancia del mensaje oficial.

Para los participantes del mercado, la combinación de inflación en línea con previsiones y una subyacente más persistente limita la posibilidad de un lenguaje abiertamente moderado. En ese contexto, cualquier matiz en el comunicado podría influir en la trayectoria del tipo de cambio y en la percepción de riesgo de los inversionistas.

El comportamiento reciente del peso refleja la interacción de dos factores principales. Por un lado, la estrategia de la Reserva Federal, descrita por Barragán como lenta y dependiente de los datos, continúa respaldando al dólar en jornadas de cautela. Por otro, la orientación que muestre Banxico mañana determinará la magnitud del atractivo de los diferenciales de tasas frente a Estados Unidos.

Un recorte convencional con advertencias prudentes podría mantener al peso mexicano siguiendo el impulso global del dólar y el interés en el carry trade local. En contraste, cualquier insinuación de acelerar el ciclo de flexibilización en el país disminuiría ese ancla de rentabilidad y elevaría la exposición del peso a las oscilaciones del apetito internacional por riesgo.

De mantenerse la línea gradual observada durante meses previos, la resistencia del peso mexicano en el mediano plazo continuaría vigente, aunque con episodios de mayor volatilidad frente al comportamiento registrado durante el verano. El impacto de los datos comparativos entre México y Estados Unidos marcará la dirección diaria en los mercados cambiarios, de acuerdo con el análisis compartido con NotiPress.

Finalmente, con la inflación mostrando un avance moderado y la política monetaria estadounidense influyendo en las decisiones regionales, la jornada del jueves será clave para evaluar la solidez del peso mexicano. La expectativa inmediata se centra en el lenguaje adoptado por Banxico, pues definirá la narrativa sobre el futuro de la política monetaria mexicana en un entorno global de incertidumbre.