
Foto: Sergio F Cara (NotiPress)
El Banco de México (Banxico) se prepara para anunciar un recorte de 25 puntos base en su tasa de referencia, con lo que pasaría del 8,00 al 7,75 %, según el análisis de mercado de Felipe Barragán, estratega de investigación en Pepperstone, consultado por NotiPress. El ajuste se alinea con la expectativa de los mercados financieros y marcaría el inicio de un ciclo de relajación monetaria más moderado.
De acuerdo con Barragán, el entorno inflacionario muestra signos incipientes de estabilización, aunque la inflación subyacente todavía permanece por encima del rango objetivo del banco central. El dato de inflación general de julio, publicado este mismo miércoles, se ubicó en 3,51 %, mientras que la inflación subyacente descendió ligeramente a 4,23 %. Los precios de servicios muestran una desaceleración, mientras que los bienes mantienen una tendencia de aumento con menor intensidad.
El análisis señala que la apreciación del peso y las tasas de interés reales elevadas, en el contexto de un crecimiento económico limitado, respaldan un recorte en la reunión del 7 de agosto de 2025. Sin embargo, se advierte que la posibilidad de nuevos recortes dependerá de la evolución de la inflación, ya que las presiones sobre los precios aún podrían persistir.
En cuanto al desempeño económico, los datos preliminares del PIB del segundo trimestre de 2025 mostraron un avance de 0,7 % respecto al trimestre anterior, superando las proyecciones. Además, algunos indicadores líderes reflejan una mejora en el margen, aunque la demanda interna y la actividad siguen siendo frágiles.
Ante este escenario, el análisis anticipa que Banxico podría moderar el tono expansivo en sus próximos comunicados y adoptar una postura dependiente de los datos macroeconómicos. No se descarta una pausa temporal en futuros recortes si las condiciones no evolucionan favorablemente.
El especialista también menciona que la política monetaria de la Reserva Federal (Fed) será un factor a considerar. Un eventual recorte en las tasas de interés en Estados Unidos podría darle a Banxico mayor margen de maniobra para continuar con ajustes a la baja sin comprometer la estabilidad financiera.
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