No habrá jornada laboral de 13 horas, confirmó Sturzenegger

Sin cambios en la duración legal de la jornada, aseguró Sturzenegger

¿El Gobierno planea imponer jornadas laborales de 13 horas? Sturzenegger respondió con firmeza y desmintió uno de los rumores más virales sobre la reforma

Rumores sobre una eventual extensión de la jornada laboral a 13 horas fueron desmentidos por el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger. En declaraciones recientes, el funcionario aseguró: "Eso de que la reforma laboral pasa la jornada de ocho a trece horas no tiene nada que ver, no tiene ningún asidero, es un disparate. Nunca se discutió eso en la propuesta del Gobierno".

Durante las próximas semanas, el Congreso nacional debatirá el proyecto de reforma laboral como parte del paquete legislativo impulsado por la administración de Javier Milei. Este conjunto de iniciativas también contempla cambios tributarios, modificaciones a los códigos civil y penal, y una nueva Ley Bases.

Argentina enfrenta una situación crítica en materia de empleo registrado, según expuso el ministro. "La Argentina hace diez años que no crea empleo formal y la mitad de nuestra fuerza de trabajo es informal. Este es un debate que hay abordar: la reforma laboral está orientada a mejorar la situación del trabajo y formalizar el empleo", afirmó.

El articulado del proyecto incorpora un nuevo apartado —el artículo 197 bis— dentro de la Ley de Contrato de Trabajo. En este punto se establece que las convenciones colectivas podrán definir esquemas laborales adaptados a cada actividad, siempre bajo los límites vigentes de jornada máxima y con al menos doce horas de descanso entre turnos.

Sturzenegger también se refirió a la presión regulatoria que enfrentan las pequeñas y medianas empresas. "Si sos una gran empresa como Ford o Arcor, tenés recursos para navegar la regulación. Pero a la pequeña o mediana empresa la regulación la asfixia. Por eso decimos que la desregulación es por sí misma propyme, porque baja barreras que afectan a los que menos estructura tienen para cumplirlas".

Costos estructurales asociados al empleo formal fueron otro de los ejes destacados por el ministro. "Todos hemos usado el empleo como una canasta de la cual morder, de la cual sacar guita. Hay una industria del juicio que muerde, el sindicalismo pide porcentaje, las cámaras empresarias también. A la relación laboral le muerden, más o menos, un millón de pesos por año".

Ninguna modificación a derechos adquiridos ni a licencias como vacaciones forma parte de la propuesta, sostuvo el funcionario. Indicó además que el objetivo principal radica en promover el trabajo registrado y reducir la informalidad laboral estructural.

Entre los cambios propuestos figura la posibilidad de adaptar los convenios colectivos por región o sector. "Si pudiéramos quebrar esa unicidad salarial, el empleo en el noroeste argentino aumentaría un dieciséis por ciento", detalló.

Finalmente, el proyecto fue desarrollado durante meses dentro del Consejo de Mayo y será presentado formalmente para su evaluación legislativa. "Va a ser una discusión amplia, pero el foco es mejorar y formalizar el empleo, no recortar derechos. La condición inexorable para una reforma previsional es que la mitad de los trabajadores deje de estar en la informalidad", concluyó.