Rubio defendió las operaciones antidrogas en el Caribe y negó que el G7 haya cuestionado la cooperación entre Estados Unidos y Reino Unido
El secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, negó que exista una suspensión en el intercambio de inteligencia con el Reino Unido, en el contexto de las operaciones antidrogas realizadas en el Caribe y el Pacífico. La declaración se produjo al cierre de la cumbre del G7, tras publicaciones que indicaban un presunto quiebre en la cooperación bilateral por el uso de misiles contra embarcaciones sospechosas.
Según Rubio "no ha cambiado nada que impida la capacidad de Estados Unidos para actuar". Resaltó que van a seguir manteniendo una asociación muy sólida con el Reino Unido. De esta manera desmintió reportes que sugerían un cese en el flujo de información estratégica entre ambos países, relacionados con la detección e intervención de embarcaciones en rutas del narcotráfico.
Durante la misma intervención, Rubio precisó que el tema no fue abordado por las delegaciones en el encuentro del G7. "Nadie lo discutió conmigo, quizá lo hablaron entre ellos, pero no fue tema en ninguna de las reuniones que sostuvimos", expresó ante las consultas de medios internacionales.
El Reino Unido habría dejado de compartir inteligencia con Washington hace más de un mes, como respuesta a los ataques lanzados por Estados Unidos contra embarcaciones en aguas del Caribe. Las acciones, denunciadas por organismos internacionales como "ejecuciones extrajudiciales", generaron tensiones diplomáticas, pero de todas maneras, Rubio negó cualquier ruptura con Londres en esta materia.
Las operaciones estadounidenses fueron ejecutadas bajo el nombre de "Operación Iron Tide" desde septiembre, con un saldo confirmado de al menos 19 embarcaciones destruidas y 76 muertes. El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos advirtió: "ninguna de las personas que se encontraban en las embarcaciones atacadas parecía representar una amenaza inminente".
Pese a estos señalamientos, Rubio defendió la legalidad de las acciones afirmando: "no creo que la Unión Europea pueda determinar lo que es la ley internacional. Desde luego, yo no puede decidir cómo Estados Unidos protege su seguridad nacional".
El secretario de Estado señaló que el despliegue militar redujo la presencia de embarcaciones ilegales. "Ya hemos visto menos narcolanchas en ambos escenarios", aseguró. Además, relacionó estas actividades con el contexto venezolano. "No tienen un gobierno legítimo, es una organización de narcotráfico, el problema central es que el jefe de ese régimen ilegítimo está acusado por la justicia estadounidense. Esta es una operación concreta contra el narcotráfico", declaró.
Sobre los cuestionamientos de algunos países europeos, Rubio agregó: "Resulta curioso que los países europeos solicitan misiles Tomahawk y defensa militar para proteger su territorio, pero objetan la presencia de un portaaviones estadounidense en el hemisferio occidental, donde vivimos".
La ministra de Exteriores de Canadá, Anita Anand, confirmó que el tema no fue incluido en la agenda oficial del G7. "La legalidad de los ataques estadounidenses corresponde determinarla a Estados Unidos", declaró la funcionaria. Con esto, descartó que se haya producido un pronunciamiento conjunto sobre la actuación de Washington en el Caribe.