Bogotá,
Patricia Manero
Crédito foto: Patricia Manero (NotiPress/Composición)
El gobierno de Estados Unidos anunció una serie de medidas retaliatorias contra Colombia luego de que este país rechazara el aterrizaje de dos vuelos de repatriación que transportaban a individuos calificados como "criminales ilegales". Según la administración estadounidense, esta decisión, atribuida al presidente colombiano Gustavo Petro, representa una amenaza para la seguridad nacional y la seguridad pública de Estados Unidos.
Entre las medidas anunciadas se encuentran:
El gobierno estadounidense calificó estas medidas como el inicio de una respuesta más amplia para garantizar que Colombia cumpla con sus obligaciones legales respecto a la aceptación de personas repatriadas.
Petro, cuya popularidad ha enfrentado desafíos en su país, ha adoptado una postura firme contra la recepción de los vuelos de repatriación en las condiciones actuales. Hasta el momento, la administración de Petro no ha emitido una respuesta oficial a las medidas anunciadas por Estados Unidos.
La situación refleja un incremento en las tensiones entre ambas naciones, que históricamente han mantenido relaciones bilaterales sólidas. Analistas advierten que la escalada de acciones económicas y diplomáticas podría afectar aún más la cooperación comercial y regional.
Mientras que Estados Unidos defiende sus acciones como necesarias para proteger su seguridad nacional, algunos observadores internacionales han expresado preocupación por las implicaciones más amplias de estas sanciones. Colombia es un socio clave en temas de seguridad regional y lucha contra el narcotráfico, y este conflicto podría tener consecuencias significativas a nivel geopolítico.