Foto: Sergio F Cara (NotiPress/Composición)
El gobierno de Estados Unidos mantiene un flujo constante de deportaciones de ciudadanos colombianos, con dos vuelos semanales organizados por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP). Estos vuelos, operados en aviones comerciales financiados por la agencia estadounidense, buscan agilizar la salida de migrantes que ya se encuentran detenidos en centros para inmigrantes ilegales.
El pasado 20 de enero de 2025, un vuelo de deportación identificándose como RCH 538, que despegó del aeropuerto Patterson en Luisiana, fue rechazado por el presidente colombiano Gustavo Petro. La aeronave, un avión militar C-17 que transportaba migrantes colombianos, tuvo que desviar su rumbo tras la decisión del mandatario. La situación fue similar en un caso con México donde un avión militar no pudo despegar de territorio estadounidense.
Petro rechaza repatriación de migrantes colombianos en aviones militares de Estados Unidos
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, afirmó en su cuenta de X que los migrantes deben ser tratados con dignidad y no como delincuentes. En ese sentido, informó que ordenó la devolución de aviones militares estadounidenses que transportaban ciudadanos colombianos repatriados.
Según Petro, aunque no puede impedir que otros países deporten migrantes, exigirá que el proceso se realice con respeto. "Si ese país los devuelve debe ser con dignidad y respeto", señaló el mandatario. Asimismo, destacó que los connacionales serán recibidos en aviones civiles y sin un trato criminalizador.
Un nuevo capítulo se abre con la acción del mandatario colombiano. El mensaje del Presidente pone sobre la mesa la postura del Gobierno de Colombia en defensa de los derechos de los migrantes y el respeto a la soberanía nacional.
Según fuentes del gobierno estadounidense citadas por Blu Radio (Colombia), la mayoría de los deportados llevaban tiempo en centros de detención, aunque algunos podrían haber sido capturados recientemente. Las directrices implementadas desde la administración de Donald Trump ordenaron la ampliación de horarios de vuelos, utilizando incluso aviones militares para agilizar el proceso.
Tras el rechazo del vuelo, los migrantes enfrentan una situación incierta, pues Estados Unidos debe encontrar un país que los acoja o devolverlos a su territorio. Petro justificó la decisión a través de su cuenta en X, afirmando: "Un migrante no es un delincuente y debe ser tratado con la dignidad que un ser humano merece" Inmediatamente expresó, "Por eso hice devolver los aviones militares estadounidenses que venían con migrantes colombianos".
Finalmente, el mandatario expresó, "no puedo hacer que los migrantes queden en un país que no los quiere; pero si ese país los devuelve debe ser con dignidad y respeto con los y con nuestro país. En aviones civiles, sin trato de delincuentes recibiremos a nuestros connacionales. Colombia se respeta".
Así, el impacto de esta decisión en las relaciones bilaterales entre Colombia y Estados Unidos aún está por definirse. La postura del gobierno colombiano se alinea con su discurso de una política migratoria más humana, mientras Estados Unidos cumple su ley migratoria según los procedimientos ya establecidos.
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