Foto: X @hugocarvajal4f
Hugo Armando Carvajal Barrios, exjefe de inteligencia militar de Venezuela, se declaró culpable en un tribunal federal de Nueva York de conspirar con las Farc para traficar cocaína hacia Estados Unidos. El Departamento de Justicia confirmó que Carvajal reconoció su implicación en una trama de narcotráfico y narcoterrorismo que se extendió por más de una década.
Durante la audiencia presidida por el juez Alvin Hellerstein, Carvajal admitió su responsabilidad en cuatro cargos penales, entre ellos conspiración para importar cocaína y delitos relacionados con armas de fuego. Las autoridades estadounidenses detallaron que el exgeneral operó como líder del Cartel de Los Soles y utilizó sus funciones públicas para facilitar el tráfico de drogas desde Venezuela.
Entre los años 2004 y 2011, y nuevamente en 2013, Carvajal estuvo al frente de la Dirección de Inteligencia Militar venezolana. Según la DEA, en ese periodo la red criminal consolidó su capacidad operativa y extendió sus vínculos con organizaciones como las Farc, entonces catalogadas como grupo terrorista.
Jay Clayton, el fiscal federal, afirmó: "La preocupante realidad es que hay poderosos funcionarios de gobiernos extranjeros que conspiran para inundar Estados Unidos con drogas que matan y debilitan". Añadió que Carvajal aprovechó su cargo para fortalecer la colaboración con las Farc mediante el suministro de armamento y protección a los envíos de droga.
Uno de los episodios más documentados fue el de 2006, cuando coordinó el traslado de 5,6 toneladas de cocaína a bordo de un avión DC-9 con matrícula estadounidense. La aeronave había despegado desde Venezuela y fue interceptada por las autoridades mexicanas.
El Departamento de Justicia indicó que Carvajal y otros funcionarios del Cartel de Los Soles "abusaron del pueblo venezolano y corrompieron las instituciones legítimas de Venezuela, incluidas partes del ejército, los servicios de inteligencia, el poder legislativo y el poder judicial, con el fin de facilitar la importación de toneladas de cocaína a Estados Unidos".
Además del tráfico de drogas, se le atribuye el suministro de explosivos y armas automáticas a las Farc, así como la protección de los cargamentos en territorio venezolano. Se reportó también que recibió pagos millonarios de narcotraficantes y participó en actos violentos, incluidos secuestros y asesinatos, para mantener el control de las rutas de tráfico.
Robert Murphy, administrador interino de la DEA, declaró: "Hugo Armando Carvajal Barrios explotó su cargo como director de inteligencia militar de Venezuela y olvidó su responsabilidad con el pueblo venezolano para perjudicar intencionalmente a Estados Unidos".
La trayectoria judicial de Carvajal incluyó varios intentos de evasión. En 2014 fue arrestado en Aruba, pero liberado por razones diplomáticas. En 2019 había sido detenido en España, aunque escapó antes de ser extraditado. Finalmente, en septiembre de 2021 fue recapturado y trasladado a Estados Unidos en julio de 2023.
Carvajal también había sido señalado desde 2008, al ser incluido en la Lista Clinton por supuestos vínculos con las Farc. En 2017 se distanció públicamente del gobierno de Nicolás Maduro, al que responsabilizó por la represión y la crisis humanitaria en Venezuela.
La sentencia final será anunciada el 29 de octubre. Hugo Armando Carvajal Barrios enfrenta una posible condena de cadena perpetua por conspiración narcoterrorista y tráfico internacional de drogas. Según el Departamento de Justicia, su conducta "causó estragos en comunidades de todo Estados Unidos y otros lugares".
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