Foto: Comando General de las Fuerzas Militares
Un total de 45 toneladas de desechos fueron evacuados de la selva amazónica durante una operación desarrollada por el Gobierno de Colombia en conjunto con organizaciones ambientales. La acción se convirtió en una de las mayores intervenciones recientes en el sur del país, con impacto directo en la preservación de ecosistemas y en la economía circular regional.
La estrategia beneficia a alrededor de cien habitantes del departamento del Amazonas, incluyendo personas con discapacidad que participan en procesos de recolección y empaque de materiales reutilizables. Esta colaboración representa un aporte al empleo local y al crecimiento de actividades productivas sostenibles.
Algunos residuos extraídos corresponden a cartón, envases, recipientes plásticos tipo PET, bolsas y aluminio. De no retirarse, esos elementos habrían terminado en rellenos sanitarios municipales o incluso en ríos y quebradas, incrementando riesgos ambientales.
Responsabilidad logística estuvo a cargo de la Fuerza Aeroespacial Colombiana. Los insumos recogidos fueron trasladados hasta Bogotá, donde se entregaron a centros especializados de reciclaje sostenible para asegurar su disposición final.
Participación de la fundación Amazonas sin Límites se enmarca en el proyecto social denominado El Jaguar – Creando Oportunidades, orientado al aprovechamiento de residuos y a la inclusión de recicladores de oficio. Esta iniciativa busca reconocer a esos trabajadores como actores relevantes en la cadena de gestión de materiales posconsumo.
De acuerdo con los lineamientos ambientales nacionales, el programa promueve procesos de aprovechamiento y reciclaje sostenible que contribuyen a la dignificación laboral de comunidades históricamente vinculadas a la recolección. En esa línea, la operación no solo reduce la presión sobre la selva, sino que fortalece la organización social de quienes participan en tareas de clasificación y empaque.
Compromiso institucional se refleja en el uso de capacidades logísticas y operativas para apoyar a poblaciones en zonas apartadas. Según la información oficial, el Gobierno de Colombia considera este tipo de operaciones parte de la obligación de proteger el extremo sur del territorio, apoyar proyectos sostenibles y salvaguardar el patrimonio natural de la nación.
Los resultados obtenidos con la evacuación de 45 toneladas evidencian la dimensión de los residuos acumulados en una de las áreas de mayor riqueza natural del continente. Con su traslado hacia la capital se asegura un tratamiento adecuado, alineado con la política de protección ambiental vigente en Colombia y con la promoción de la economía circular.
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