Bogotá ,
Carlos Ortíz
Crédito foto: Sergio F Cara (NotiPress/Composición)
El peso colombiano cerró la jornada este 2 de octubre de 2025 con pérdidas frente a las principales divisas, en medio de un escenario marcado por la incertidumbre política y la caída de los precios del crudo WTI, de acuerdo con el análisis de Felipe Barragán, estratega de investigación de mercados en Pepperstone.
Según el especialista, la depreciación se produjo mientras los operadores asimilaban datos económicos mixtos en el país. La producción de cemento mostró una menor actividad inversora, y el PMI de septiembre retrocedió a 52,0 puntos desde los máximos recientes, reflejando una desaceleración en el impulso económico. A la par, la tasa de desempleo descendió a 8,6 %, señal de un mercado laboral sólido, aunque insuficiente para fortalecer la moneda.
En el plano internacional, la presión provino de la prolongación de las pérdidas del petróleo WTI, con expectativas de que la OPEP+ acelere los incrementos de suministro a partir de octubre. Barragán advirtió que cualquier aumento "podría exacerbar el exceso de oferta mundial ya señalado por la AIE y pesar sobre los ingresos por exportaciones de Colombia, dada la dependencia del país del petróleo para el equilibrio fiscal".
En política monetaria, el Banco de la República mantuvo los tipos de interés en 9,25 %, en línea con las proyecciones de mercado. Este nivel, relativamente alto en comparación global, sostiene cierto atractivo para la divisa. No obstante, el escenario continúa condicionado por la inflación, la suspensión de la regla fiscal y un clima político incierto, lo que limita la confianza de los inversores.
En el frente externo, el cierre del Gobierno de Estados Unidos el 1 de octubre acentuó la aversión al riesgo a nivel global. Barragán señaló que un estancamiento prolongado podría incentivar la salida de capitales hacia activos refugio como el oro, el franco suizo o el yen japonés, en detrimento de las monedas emergentes como el peso.
De cara a las próximas semanas, sin indicadores económicos relevantes en agenda, los operadores estarán atentos a la evolución de los precios del petróleo y al desenlace político en Estados Unidos, dos factores que seguirán determinando el comportamiento ante la depreciación del peso.