Foto: Ecopetrol
El presidente de Colombia Gustavo Petro vetó un proyecto en el área de los hidrocarburos cuyo impacto habría incrementado las utilidades netas de la paraestatal Ecopetrol en un 14%. Según Juan Carlos Echeverry, exministro de Hacienda y expresidente de Ecopetrol, este negocio representaba una oportunidad significativa para la compañía.
La principal empresa petrolera estatal de Colombia, Ecopetrol, estaba evaluando la compra de una participación en CrownRock L.P. Esta empresa estadounidense posee activos valiosos en el sector petrolero y fue adquirida por Occidental Petroleum (Oxy) por 12 mil millones de dólares en diciembre de 2023. Oxy es una importante multinacional del sector energético con operaciones en varios continentes y su compra de CrownRock formó parte de una estrategia para expandir su cartera de activos de hidrocarburos.
En mayo de 2024, Ecopetrol ofreció adquirir el 30% de los activos de CrownRock, en una operación denominada proyecto Oslo, tras la aprobación de su junta directiva. Este proyecto buscaba capitalizar la experiencia y los activos de Oxy en la explotación de hidrocarburos, brindando a Ecopetrol una oportunidad para aumentar significativamente su producción y reservas.
Si la compra se hubiera concretado, Ecopetrol habría aumentado su producción proyectada para 2025 en 65 mil barriles diarios, alcanzando un total de 800 mil barriles diarios, un incremento del 9% respecto a su producción actual. Además, las reservas 1P, las reservas probadas y desarrolladas más seguras de extraer, habrían aumentado en 212 millones de barriles de petróleo equivalente, generando igualmente un aumento del 9% respecto a las reservas actuales.
De acuerdo con Echeverry, en términos de ganancias, sin el proyecto Oslo, se espera una utilidad de entre 9 y 12 billones de pesos para el próximo año. Con Oslo, esta cifra habría aumentado en un 14%, añadiendo aproximadamente 1.6 billones de pesos adicionales. Este incremento beneficiaría tanto a los accionistas minoritarios como al gobierno colombiano, principal accionista de Ecopetrol.
A pesar de la aprobación de la junta directiva y los comités pertinentes, el presidente Petro vetó el proyecto. Echeverry calificó esta decisión como "gravísima", destacando es raro que un presidente vete un proyecto de tal magnitud cuando ya ha sido aprobado en todas las instancias necesarias. Añadió, la inversión hubiera sido crucial tanto para Ecopetrol como para Oxy, y discutió el historial de compromisos significativos hechos en diversas inversiones previas.
Respecto al veto presidencial, Gustavo Petro ejerció esta facultad constitucional, la cual le dota de la capacidad de objetar proyectos que considera no alineados con la política pública o los intereses del país. En este caso, su decisión interrumpe uno de los mejores negocios que Ecopetrol podría haber concretado en la actualidad, según Echeverry, quien destacó la solidez financiera de la empresa y su preparación para asumir este nuevo desafío.
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