Ciudad de México,
Noelia Acuña
Crédito foto: Sergio F Cara (NotiPress/Composición)
En vísperas de las elecciones presidenciales del domingo 28 de julio de 2024 en Venezuela, el régimen de Nicolás Maduro adoptó acciones contundentes para restringir la participación de observadores internacionales. Estas medidas generaron controversia y preocupación en la comunidad internacional debido a la negación de ingreso al país. Entre las medidas, se le solicitó al expresidente argentino Alberto Fernández desistiera de su viaje a Venezuela.
Fernández había sido invitado como veedor electoral por el Consejo Nacional Electoral de Venezuela. Sin embargo, Maduro argumentó que las declaraciones de Fernández en medios nacionales generaban incomodidad y dudas sobre su imparcialidad. El exmandatario argentino en sintonía con el presidente brasileño Lula da Silva, instó a Maduro a entregar el poder en caso de perder las elecciones, provocando el descontento del régimen.
Con una publicación en X, Fernández expresó su sorpresa ante la situación, afirmando su intención era cumplir con su rol de veedor electoral de manera objetiva e imparcial. Asimismo, manifestó su esperanza de que Venezuela pudiera celebrar elecciones transparentes, respetando el veredicto popular y se pueda recuperar la convivencia democrática y permita el regreso de millones de venezolanos que emigraron debido a la crisis.
Paralelamente, el presidente de Panamá, José Raúl Mulino, informó que un vuelo de Copa Airlines, donde transportaba a varios expresidentes latinoamericanos, no recibió autorización para despegar desde Panamá hacia Caracas. Entre los pasajeros se encontraban la expresidenta Mireya Moscoso y el exmandatario boliviano Jorge Tuto Quiroga, quienes fueron retenidos debido al bloqueo del espacio aéreo venezolano.
Igualmente, Quiroga denunció que casi 450 personas fueron tomadas como rehenes para impedir que los exmandatarios llegaran a Venezuela y brindaran su apoyo internacional a los opositores del régimen. El régimen de Maduro no solo impidió la entrada de observadores individuales, sino también de una delegación de parlamentarios del Partido Popular (PP) de España.
Tal es así que, los invitados por el candidato opositor Edmundo González Urrutia y María Corina Machado, fueron retenidos en el aeropuerto de Caracas. El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, exigió su liberación inmediata y el gobierno español se comprometió a proporcionar el apoyo necesario a la delegación.
"Me acaban de comunicar que la delegación del PP formada por 10 diputados, senadores y europarlamentarios está retenida en el aeropuerto de Caracas por el régimen de Maduro. Exijo su liberación inmediata y que el Gobierno de España ponga los medios necesarios a tal fin" denunció Nuñez Feijóo.
La abogada defensora de Derechos Humanos, Tamara Suju, también denunció la situación en un video, señalando que la oposición democrática había invitado a la delegación española para acompañar el proceso electoral. Asimismo, lamentó no se les permitiera tener contacto con el embajador español en Venezuela ni con los jefes de los comandos de observación, quedando a merced de las fuerzas de seguridad venezolanas.
No obstante, otros observadores internacionales como el presidente de Colombia, Gustavo Petro y el presidente de Brasil, Lula da Silva, también han criticado las acciones de Nicolás Maduro. En ese sentido, Petro señaló que el derecho a elegir es tanto individual como social, mientras Lula instó a Maduro a respetar el proceso democrático. Ante esta situación, la comunidad internacional sigue de cerca el desarrollo de estos comicios del domingo 28 de julio, a la espera de que se lleve a cabo de manera justa y transparente para el bienestar de Venezuela.