Bajada de la inflación subyacente en Estados Unidos impulsa optimismo en los mercados

Los datos más recientes de inflación en Estados Unidos revelaron un panorama mixto que fue interpretado con optimismo por los mercados financieros. De acuerdo con el informe publicado, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) avanzó un 2.9% anual en diciembre, en línea con las expectativas del mercado y marcando el tercer aumento consecutivo desde septiembre. Sin embargo, la verdadera sorpresa provino de la inflación subyacente, que excluye los precios volátiles de alimentos y energía, la cual registró un descenso inesperado al 3.2%.

Quásar Elizundia, estratega de Investigación de Mercados en Pepperstone, destacó la importancia de este dato en el contexto económico actual. "Los datos de inflación de EE.UU. correspondientes a diciembre han arrojado una imagen mixta, pero con un matiz que el mercado ha decidido interpretar con optimismo". La inesperada caída de la métrica subyacente generó un cambio en el sentimiento del mercado, que ve en este resultado un posible alivio de las presiones inflacionarias acumuladas durante los últimos meses.

El informe inflacionario coincidió con la publicación del Índice de Precios al Productor (IPP), que también mostró una moderación. Esta combinación de indicadores impulsó un movimiento positivo en los mercados financieros, llevando al S&P 500 a registrar un alza del 1.6%. Además, los rendimientos de los bonos del Tesoro estadounidense cayeron, mientras que el dólar experimentó una ligera depreciación frente a otras divisas.

"La reacción del mercado sugiere que los inversores ven en estos datos una señal de que las presiones inflacionarias pudieran estarse moderando", añadió Elizundia. Este cambio en las expectativas refuerza la posibilidad de que la Reserva Federal (Fed) tenga mayor margen para adoptar una postura monetaria más acomodaticia en el futuro.

Pese al optimismo, los analistas destacan que la inflación general aún se mantiene por encima del objetivo del 2% establecido por la Fed. La fortaleza del mercado laboral, reflejada en la creación de 256,000 nuevos empleos durante diciembre, sigue siendo un factor determinante en las próximas decisiones de política monetaria.

El desempeño positivo del mercado también se vio impulsado por sólidos resultados corporativos en el sector bancario. Empresas como JPMorgan, Wells Fargo y Goldman Sachs superaron las expectativas de los analistas, lo que contribuyó a fortalecer la confianza de los inversores en un entorno económico más favorable.

A pesar de la mejora en el índice subyacente, algunos analistas advierten que aún es prematuro anticipar recortes de tasas de forma inminente. "Es importante continuar monitoreando de cerca los datos económicos y la reacción del mercado a medida que evoluciona la situación inflacionaria", concluyó Elizundia.