Foto: Sergio F Cara (NotiPress)
La inversión pública y privada en México continúa mostrando señales de debilidad. Esta caída afecta directamente la generación de empleo, advirtió el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) en su análisis más reciente.
De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), la inversión fija bruta registró en agosto una caída mensual de 2,7%, acumulando doce meses consecutivos de retrocesos en términos anuales. En ese mes, la inversión total disminuyó 8,9% respecto al mismo periodo del año anterior.
El informe del CEESP subraya que la inversión pública fue la más afectada, con una contracción anual de 21,2% en agosto y dieciséis meses consecutivos a la baja. Esta tendencia responde a una menor asignación de recursos tras el cierre de los grandes proyectos de infraestructura del sexenio anterior. En contraste, se han incrementado los gastos en programas sociales como la pensión para adultos mayores.
No obstante, el organismo señala que el principal motor de la caída de la inversión total fue la inversión privada, que descendió 9,0% anual. Según el CEESP, esta reducción obedece a la incertidumbre generada por diversos factores coyunturales, entre ellos la política arancelaria de Estados Unidos, la revisión del T-MEC, así como las reformas judiciales y cambios a la ley de amparo en México.
A estos factores se suman el deterioro de la seguridad pública y el incremento de la violencia e impunidad, que han reforzado un ambiente de cautela entre inversionistas. Esta percepción negativa se refleja también en la confianza empresarial, cuyo indicador global se mantiene por debajo de los 50 puntos. En octubre, dicho indicador reportó una baja mensual de 0.8 puntos y una caída anual de 3.4 puntos, acumulando dieciocho meses consecutivos de retrocesos.
Por sectores, la confianza empresarial también mostró descensos: la construcción cayó 3.2 puntos, el comercio 4.4 y la industria manufacturera 3.1 puntos en términos anuales. Todos acumulan más de diecisiete meses de resultados negativos.
En efecto, la generación de empleo se ve afectada. "Se perciben dificultades para conseguir un empleo formal y mejor remunerado. De acuerdo con las cifras de la encuesta nacional de ocupación y empleo, mientras que la ocupación en el sector formal se reduce la informal aumenta", indica el documento.
CEESP advirtió que la percepción de los consumidores también se ha deteriorado. En octubre, el indicador de confianza del consumidor cayó 3,2% respecto al mismo mes del año anterior, marcando su décima baja consecutiva.
En este contexto, consideran poco probable que la situación mejore en lo que queda del año. Al mismo tiempo mantienen bajas expectativas para el año que viene, ajustado a la baja por analistas del sector privado, pasando de 2,3% a 1,3%. El CEESP concluye que es prioritario mejorar el ambiente de negocios para facilitar la inversión y fomentar la creación de empleos.
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