Foto: Josue Díaz (NotiPress/Composición)
En la opinión del Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP), el crecimiento de la economía mexicana mantiene expectativas optimistas al segundo trimestre de 2023. No obstante, ante la sostenibilidad de las finanzas públicas y el dinamismo del PIB, hay una serie de factores que podrían afectar su evolución.
De acuerdo con la Estimación Oportuna del Producto Interno Bruto (PIB), publicada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el PIB presentó un incremento anual de 3.6% al segundo trimestre del año. Bajo esta línea, el CEESP informó a NotiPress que las estimaciones sobre el PIB complementan el pronóstico de crecimiento económico, el cual podría ubicarse entre 2.7 y 3.2 por ciento.
Si bien existe el riesgo de estancamiento económico durante los siguientes trimestres de 2023, el PIB del segundo periodo ya marca un retroceso frente al primer resultado del año. Según el CEESP, órgano asesor del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) en los últimos cuatro años, el PIB per cápita se contrajo 5 puntos, por lo cual podría ubicarse en 4% inferior a su nivel de 2018 al cierre del año.
Otro factor destacado por los voceros del sector privado es el crecimiento de la inversión fija bruta, que repuntó a 4.5%, su cifra más alta desde julio de 2018. En este rubro, los economistas del centro consideran que el repunte ocurrió gracias a la prioridad de los megaproyectos del Gobierno de México.
Por su parte, las finanzas públicas muestran un panorama saludable, pero persisten las dudas sobre su sostenibilidad a partir de los resultados del primer semestre del 2023, agregó el CEESP. Por ello, el órgano asesor empresarial informó que entre enero y julio, los ingresos públicos tuvieron una caída anual del 1.6 por ciento.
Con un déficit de 200 mil millones de pesos frente a lo programado, los ingresos tuvieron caídas derivadas de la disminución del 24% en los ingresos petroleros. Este comportamiento se encuentra acompañado de la baja en los precios de exportación del petróleo y gas, así como del fortalecimiento del peso frente al dólar.
Sobre la recaudación tributaria, INEGI informó un incremento del 4.1 por ciento, como consecuencia del aumento de 140% en la recaudación del impuesto especial sobre la producción y servicios (IEPS). Al respecto de la evolución de los impuestos, la base fiscal mostró debilidad, y en el caso del impuesto al valor agregado (IVA), sus ingresos disminuyeron 21 por ciento en junio de 2023.
Finalmente, ante el comportamiento de las finanzas públicas y el dinamismo del PIB, el CEESP informó que el pronóstico de crecimiento económico se ubicó en un promedio de 1.49 puntos para 2024. Ello representa la cifra más baja para este indicador desde diciembre de 2021, y actualmente se ve afectada por la incertidumbre financiera en Estados Unidos.
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