Ciudad de México,
Emiliano Fuentes
Crédito foto: Sergio Cara (NotiPress)
Debido a la pandemia por Covid-19, se ha sugerido a los gobiernos de todo el mundo llevar a cabo políticas contracíclicas. Estimaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI) sugieren aumentos en los déficits presupuestarios de los diferentes países que oscilen ente 3.9% del Producto Interno Bruto (PIB) y 12.7% en 2020. De esta forma, la deuda pública en México inevitablemente crecerá y podría elevarse en cerca de 10 puntos porcentuales, para situarse en niveles superiores a 55% del PIB al final de 2020. En otros países, la deuda ha aumentado debido a un despliegue de gasto para disminuir los efectos negativos en la economía mundial tras los cierres masivos de comercios.
En este sentido, el exsecretario de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Carlos Urzúa, comentó, respecto a la deuda de México, esta incrementará a finales de 2020 1.5 billones de pesos. El exfuncionario de la administración federal recalcó, como porcentaje del PIB, durante este año la deuda se incrementó de 47% a 57% del PIB, lo cual resulta el más alto reportado desde 2010.
Tras el desplome de la economía mexicana, el PIB se verá severamente reducido en comparación con 2019. Por ende, la proporción de la misma cantidad de deuda, en el nuevo producto reducido se verá reflejado en un aumento de más de 10 puntos porcentuales en el cociente de deuda/PIB.
En este sentido, es un caso distinto el de diferentes países en todo el mundo que han aplicado distintas estrategias comprometiendo un gran despliegue de recursos- Esto ha llevado a la deuda pública mundial a máximos nunca antes vistos en la historia, por arriba del 100% del PIB internacional, superando la deuda el total de la producción mundial en todo un año.
Ante este comportamiento, hubo un consenso generalizado para atender la situación económica adversa en el mundo entre los más liberales y los más ortodoxos. Se ha reconocido la necesidad de mayor deuda pública para revertir los efectos de la dura situación. Incluso, entidades que históricamente han recomendado limitar la deuda y el gasto público, como el FMI, ahora han incentivado a algunos países para aprovechar las bajas tasas de interés y aumentar el gasto en infraestructura sin preocuparse del aumento en la deuda pública como porcentaje del PIB.
Si bien, durante años anteriores a la crisis económica post-pandemia, la deuda como proporción del PIB en México reportaba un aumento sostenido, todavía estaba dentro de niveles manejables. No obstante, como reportan especialistas, durante 2020 esta se disparó y reportó un crecimiento histórico durante el año.