Ciudad de México,
Fernanda Martínez
Crédito foto: Alexa Vargas (NotiPress)
Pese a haber retorcido por segundo año consecutivo, la deuda mundial se mantiene por encima de su nivel prepandemia, informó el Fondo Monetario Mundial (FMI). Por lo cual, las autoridades tendrán que mantener su compromiso de preservar la sostenibilidad de las deudas, alertó el organismo.
De acuerdo con la Base de Datos de la Deuda Global, en 2022 el endeudamiento era 238 por ciento superior del producto interno bruto (PIB) mundial, 9% más que ene 2019. En términos de dólares, la duda estimada es de 235 trillones de dólares por encima de su nivel en 2021.
A pesar del repunte del crecimiento económico a partir de 2020 y de una inflación mucho mayor de la esperada, el adeudo público se mantuvo sumamente alta. Los déficits fiscales mantuvieron los niveles de endeudamiento público elevados, pues muchos gobiernos gastaron más para impulsar el crecimiento y responder a los aumentos de los precios.
Como resultado, la deuda pública cayó casi ocho puntos del PIB en los últimos dos años. Por su parte, el endeudamiento privado, que incluye familias y corporaciones no financieras, declinaron más rápido, cayendo 12 puntos del PIB.
Previo a la pandemia, el adeudo global había mantenido una tendencia al alza por décadas. Desde mediados de la década de 1970, el endeudamiento público se triplicó, llegando al 92% del PIB al cierre del 2022. Además, la deuda privada tuvo un crecimiento del 146% entre 1960 y 2022, señaló el FMI.
China, señaló el organismo, jugó un rol fundamental en el aumento de la deuda mundial en las últimas décadas al superar el endeudamiento con el crecimiento económico. En el gigante asiático, la deuda creció casi al mismo nivel que en Estados Unidos, pero China sigue teniendo una diferencia de 22.5 trillones de dólares frente a los estadounidenses.
En los países de bajos ingresos, la deuda tuvo un crecimiento significativo en las últimas dos décadas. A pesar de sus niveles, el adeudo privado se mantuvo bajo a comparación con las economías emergentes y avanzadas. Más de la mitad de los países de bajos ingresos están en un sobreendeudamiento de alto riesgo.
Ante este panorama, el FMI hizo un llamado a los gobiernos a tomar una acción urgente para reducir las vulnerabilidades del endeudamiento e invertir las tendencias del endeudamiento a largo plazo.
Para el sector privado, estas políticas podrían incluir el monitoreo de las familias y corporaciones no financieras para detectar cargas de deuda y riesgos relacionados con la estabilidad financiera. Respecto a la deuda pública, se recomendó un marco fiscal creíble que pueda guiar el proceso para equilibrar las necesidades de gasto con la sostenibilidad de la deuda. Asimismo, se instó a los países de bajos ingresos a mejorar su capacidad de recaudar ingresos fiscales adicionales.