Foto: Sergio F Cara (NotiPress)
El peso mexicano mostró estabilidad frente al dólar estadounidense durante la jornada del 28 de abril de 2025, impulsado por datos económicos favorables vinculados al desempeño comercial del país. Según el análisis de Quasar Elizundia, estratega de investigación de mercados en Pepperstone, los resultados positivos del comercio exterior fueron fundamentales para sostener el valor de la moneda nacional en un entorno internacional de creciente incertidumbre.
De acuerdo con información a la que tuvo acceso NotiPress, México registró en marzo de 2025 un superávit comercial. Esto superó las expectativas del mercado, impulsado principalmente por el crecimiento en el superávit no petrolero. Este avance se vio complementado por una reducción en el déficit de la balanza petrolera, lo cual fortaleció aún más el balance comercial general y proporcionó un respaldo sólido a la moneda mexicana.
Las exportaciones no petroleras desempeñaron un papel relevante, consolidándose como un pilar clave para la balanza comercial. En palabras de Elizundia, "el superávit comercial para marzo superó las expectativas, impulsado principalmente por un aumento en el superávit comercial no petrolero", evidencia de un impulso diversificado en los sectores productivos de exportación. Esta diversificación ofreció mayor resistencia ante las fluctuaciones externas y mejoró la percepción de fortaleza económica del país.
Por su parte, la disminución en el déficit de la balanza petrolera también aportó al entorno económico favorable. Aunque de menor magnitud que el avance en los sectores no petroleros, la contención del déficit petrolero ayudó a configurar una balanza comercial más equilibrada. Este conjunto de factores reforzó la estabilidad del peso, en un periodo caracterizado por tensiones comerciales globales que afectaron a otras economías emergentes.
En el ámbito internacional, los mercados financieros iniciaron la semana con alta expectativa respecto a la publicación de datos económicos relevantes. Sin embargo, el peso mexicano mostró estabilidad en parte gracias a la falta de acontecimientos significativos durante el fin de semana previo, lo que permitió que los fundamentos económicos internos tuvieran mayor influencia en su comportamiento.
Asimismo, los participantes del mercado mantuvieron su atención en la evolución de las políticas comerciales de Estados Unidos. El seguimiento se centró especialmente en el contexto de las negociaciones y disputas comerciales con socios como China. Pese a este escenario de riesgo externo, la mejora en el comercio exterior mexicano sirvió de ancla para la confianza en la moneda nacional.
Finalmente, el documento de Pepperstone concluyó subrayando que los próximos datos económicos resultarán determinantes para definir el comportamiento del peso mexicano. Los recientes avances en el superávit no petrolero y la disminución del déficit petrolero se posicionan como pilares clave dentro del escenario inmediato para la moneda.
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