Ciudad de México ,
Carlos Ortíz
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Con base a celebraciones religiosas del 12 de diciembre, autoridades del Estado de México implementaron un operativo especial para salvaguardar a los peregrinos que se trasladan a pie, en bicicleta o en caravanas hacia la Basílica de Guadalupe. Las acciones, en marcha desde el 11 y hasta el 13 de diciembre, buscan garantizar condiciones de tránsito seguro y respuesta médica oportuna.
El dispositivo coordinado por la Secretaría de Seguridad del Estado de México (SSEM) contempla el resguardo de más de un millón 600 mil personas mediante el despliegue de mil 972 policías estatales, 470 unidades móviles, 16 binomios caninos y 30 caballos. Estas labores se concentran en 901 templos religiosos, 248 misas de alta concentración y 72 peregrinaciones dentro del territorio mexiquense, según informó la dependencia en un comunicado oficial.
Gobierno del Estado de México, a través de la Coordinación General de Protección Civil, instaló un operativo especial sobre la carretera Peñón–Texcoco, uno de los tramos con mayor afluencia de feligreses. Este operativo inició el 11 de diciembre a las 15:00 horas y se extenderá hasta las 04:00 del día 12, con énfasis en la atención médica prehospitalaria y prevención de riesgos. "El compromiso es acompañar este esfuerzo colectivo con profesionalismo y cercanía", afirmó Adrián Hernández Romero, coordinador general, destacando el trabajo para brindar asistencia en puntos de mayor concentración.
Tal despliegue cuenta con 22 elementos, una ambulancia, dos unidades de rescate y cinco camionetas tipo pickup. Estas unidades realizan recorridos preventivos y supervisan los tramos carreteros, mientras personal médico atiende afecciones comunes en caminatas prolongadas como deshidratación, fatiga, irritaciones y síncope por agotamiento.
La SSEM estableció cordones de seguridad, vigilancia fija y dispositivos viales alrededor de recintos de alta concurrencia, reforzados por patrullajes pie tierra, vigilancia por cámaras del C5 y cortes de circulación. Además, se mantiene enlace con cuerpos de emergencia, como el Grupo Relámpagos, el Centro Regulador de Urgencias Médicas y la Guardia Nacional.
Este operativo ocurre en un contexto de fuerte arraigo cultural y espiritual. La devoción a la Virgen de Guadalupe, con más de 470 años de historia, se mantiene como eje central de identidad para millones de mexicanos. Según Patrick Johansson, del Instituto de Investigaciones Históricas de la UNAM, "el fervor por la Virgen de Guadalupe permanece fuerte", incluso frente al descenso en el número de católicos reportado por los censos nacionales.
Entre el 8 y el 12 de diciembre se espera la llegada de 3.5 millones de personas a la Basílica de Guadalupe, con un pico estimado de 1.5 millones durante la noche del 11, según cifras de la alcaldía Gustavo A. Madero. Este movimiento masivo motiva la coordinación interestatal en materia de movilidad y atención médica.
Desde una perspectiva cultural, expertos de la UNAM como Jesús Segura Hidalgo afirman que el culto guadalupano "se centra en las necesidades y experiencias cotidianas de la gente,especialmente entre los menos favorecidos". En este marco, las peregrinaciones representan no solo manifestaciones religiosas, sino también expresiones de identidad comunitaria.