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México está localizado entre las regiones ciclogenéticas del Atlántico Norte y el Pacífico Oriente, por lo cual la temporada de lluvias se vincula con la temporada de huracanes y ciclones tropicales. De acuerdo con la recopilación de mapas históricos de los ciclones tropicales desde 1950, CONAGUA estableció el 15 de mayo como el inicio de la temporada de ciclones tropicales en el océano Pacífico y el 1 de junio en el océano Atlántico.
Sin embargo, dado el impacto del fenómeno "El Niño" en las temperaturas de la superficie del mar en el Pacífico, el National Hurricane Center prevé que la incidencia de huracanes en dicha región se retrase. Ante esto, el ente optó por no emitir pronósticos sobre la predicción de huracanes en el pacífico y atlántico hasta el 27 de mayo de 2024.
Al 18 de abril las estimaciones coinciden con la fecha de CONAGUA. Así, el 1 de junio se señala como el inicio de la temporada de ciclones tropicales en el atlántico y el 30 de noviembre como el cierre, mientras en el pacífico el 15 de mayo es la fecha de apertura y el 30 de noviembre el cierre.
Por su parte, Emilio Rangel, meteorólogo de la Universidad Autónoma del Estado de México, respalda el argumento de que la temporada de lluvias se recorrerá. Mas, detalla, este cambio se ha dado progresivamente desde la década de 1990. Pues anteriormente, las precipitaciones iniciaban en mayo y actualmente estas ocurren con más frecuencia hasta mediados de junio. De esta forma, tomando en cuenta que en marzo no hubo lluvias y tuvo como consecuencia un déficit, el experto prevé en abril las precipitaciones también sean escasas.
"Con dos eventos de precipitación fuerte podríamos completar la cifra de acumulado del mes, lo cual es lo típico al inicio de la primavera, por lo que la perspectiva para mayo es que lloverá a mitades de mes". En consonancia con esta previsión, Rangel señaló que la temporada de estiaje dejó temperaturas de entre 23 y 27 grados en el Valle de México, sin reportar ondas de calor. Por lo cual, estima que en las próximas semanas las altas temperaturas serán continuas y sostenidas.
A su vez, el meteorólogo explica, en junio del año pasado se registraron las temperaturas máximas, pero dado que no se prevén ondas de calor combinadas por un anticiclón, es poco probable que esto suceda en la misma temporada. No obstante, las previsiones para este año arrojan que en los centros urbanos aumentará la sensación térmica en los próximos meses.
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