Foto: X @vaticannews_es
El cónclave para elegir al sucesor del fallecido papa Francisco iniciará este miércoles 7 de mayo en la Capilla Sixtina, siguiendo lo establecido en la constitución apostólica Universi Dominici Gregis. Según las autoridades vaticanas, las puertas de la Capilla Sixtina se cerrarán entre las 16:30 y las 17:00 horas, tiempo local de Roma (8:30 y 9:00 horas del centro de México).
Los 133 cardenales electores, representantes de 70 países de todos los continentes, fueron alojados desde el martes 6 de mayo en la residencia de Santa Marta y otras dependencias del Vaticano. Estos cardenales, todos menores de 80 años, participarán en la misa solemne Pro eligendo pontifice en la Basílica de San Pedro antes de trasladarse a la Capilla Paulina, según los procedimientos tradicionales.
Durante la homilía de la misa, el decano del Colegio Cardenalicio, Giovanni Battista Re, afirmó: "Es fuerte la llamada a mantener la unidad de la Iglesia". En su mensaje, el cardenal pidió a los fieles rezar "para que Dios conceda a la Iglesia el Papa que mejor sepa despertar las conciencias de todos y las fuerzas morales y espirituales en la sociedad actual, caracterizada por un gran progreso tecnológico, pero que tiende a olvidarse de Dios". Asimismo, agregó: "La unidad de la Iglesia es querida por Cristo; una unidad que no significa uniformidad, sino una firme y profunda comunión en la diversidad".
Tras la misa, los cardenales, vestidos con el hábito coral, marcharán en procesión hacia la Capilla Sixtina, invocando la asistencia del Espíritu Santo mediante el canto del Veni Creator. Frente al fresco del Juicio Final de Miguel Ángel, los cardenales prestarán juramento colocando la mano sobre el Evangelio. Una vez completado el ingreso de los participantes, el maestro de ceremonias pronunciará la frase "extra omnes" (todos fuera), momento en que las puertas serán clausuradas para dar inicio al cónclave.
La primera votación está programada para realizarse esta misma tarde, aunque expertos en el tema indicaron que es poco probable que se logre una decisión definitiva durante la jornada inicial. De acuerdo con las normas vigentes, se requiere una mayoría de dos tercios de los votos emitidos para elegir al nuevo pontífice.
De no alcanzarse un acuerdo en las primeras rondas, los cardenales continuarán votando con cuatro votaciones diarias: dos en la mañana y dos en la tarde. Si después de tres días consecutivos no se logra consenso, las votaciones se suspenderán durante un máximo de 24 horas para dar espacio a la oración, una exhortación espiritual y una reunión libre entre los electores.
El proceso continuará hasta alcanzar la mayoría necesaria. La señal que anunciará al mundo la elección de un nuevo Papa será una fumata blanca, generada al quemar las papeletas junto con sustancias químicas especiales. Mientras no se alcance un acuerdo, el humo negro indicará que las deliberaciones siguen en curso. Una vez aceptada la elección, el nuevo pontífice seleccionará su nombre papal y será presentado desde el balcón central de la Basílica de San Pedro con las palabras tradicionales "Habemus Papam".
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