Foto: Ministerio de Relaciones Exteriores de China
¿Es posible desarrollar inteligencia artificial y computación cuántica bajo una estructura política centralizada? Esta interrogante cobra fuerza tras la presentación del 15º Plan Quinquenal durante el Cuarto Pleno del XX Comité Central del Partido Comunista de China (PCCh), el 30 de octubre de 2025.
Durante su intervención ante el Comité, el presidente Xi Jinping afirmó que el plan busca "desarrollar activamente nuevas fuerzas productivas de calidad" mediante una coordinación ajustada entre innovación científica e industrial. Las directrices se enfocan en sectores como semiconductores, energías limpias, biotecnología y computación cuántica.
Así, desde la perspectiva oficial, estos sectores deben consolidar el sistema económico nacional sin desvincularse del control político. "Reforzar la integración completa entre la innovación tecnológica e industrial", figura entre las prioridades mencionadas por el presidente.
El investigador Eduardo Regalado, del Centro de Investigaciones de Política Internacional de Cuba, explicó en entrevista con el canal estatal Xinhua que "son áreas que no solo impulsan el desarrollo económico". Agregó además que estos sectores "garantizan la autosuficiencia tecnológica del país". Esta hoja de ruta cobra especial relevancia a la luz de la carrera tecnológica contra Estados Unidos.
Una imagen proveniente del discurso político maoísta reapareció en el planteamiento de Xi: "tocar el piano". Esta expresión, citada originalmente por Mao Zedong en 1949, fue retomada como guía para armonizar prioridades diversas sin perder coordinación. "Los diez dedos deben moverse, pero no todos al mismo tiempo. Debe haber un ritmo y una coordinación mutua", recordó el mandatario al citar a Mao.
También se incluyen advertencias sobre el ritmo de implementación en cada región. Entre las recomendaciones figura la necesidad de "evaluar adecuadamente la viabilidad de todos los planes pertinentes", además de "adoptar un enfoque sensato, racional y realista" y "abstenerse de lanzarse de cabeza a nuevas iniciativas".
En lugar de otorgar autonomía plena a los niveles locales, el plan sugiere que las medidas deben aplicarse conforme al principio 因地制宜, traducido en el documento como "adaptarse a las condiciones locales". Esta orientación se enmarca dentro del concepto de "tablero nacional", otra metáfora empleada en las directrices firmadas por Xi, donde la planificación general prevalece sobre decisiones regionales aisladas.
Regalado destacó que el vínculo entre innovación, seguridad y desarrollo se ha convertido en un eje clave para la estructura del nuevo ciclo. Afirmó que "la coordinación entre seguridad y desarrollo, especialmente en ciencia, tecnología e innovación", constituye un componente central del documento.
Igualmente, el proceso de redacción involucró consultas en doce divisiones administrativas, seis equipos de investigación y más de tres millones de comentarios en línea. Según datos presentados durante el Pleno, se integraron 218 revisiones a partir de 452 sugerencias recibidas por el Comité Central.
Finalmente, China proyecta alcanzar la modernización socialista hacia 2035. Bajo este plan, los sectores emergentes deberán evolucionar dentro de una estructura jerárquica en la que el liderazgo político central mantenga el control de la dirección estratégica.
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