Ciudad de México,
Ali Figueroa
Crédito foto: Sergio F Cara (NotiPress)
Con la legislación que permite la eutanasia en Uruguay, Latinoamérica sumó 3 países con despenalización de la eutanasia activa. A diferencia del caso uruguayo, así como en Colombia y Ecuador, otros países latinoamericanos autorizan el rechazo a tratamientos para alargar la vida en condiciones terminales.
Bajo el respaldo del 77 por ciento de la población, el Parlamento de Uruguay votó por el establecimiento oficial de la eutanasia el 15 de octubre. Con motivo de seguir los esquemas de salud en Bélgica y Países Bajos, el país comenzó a ofrecer la asistencia activa para una muerte digna.
Por su parte, Colombia y Ecuador permiten este procedimiento; no obstante, la decisión ocurrió a través de fallos judiciales. Según la sentencia de la Suprema Corte de estos países, la eutanasia está disponible para los pacientes que padezcan un grave sufrimiento físico o psíquico de naturaleza incurable.
Frente a los 3 países latinoamericanos que permiten la eutanasia, Argentina, Chile, y México ofrecen una alternativa para evitar prolongar de manera artificial la vida. En Argentina existe una medida de eutanasia pasiva a los pacientes para rechazar tratamientos que prolonguen un estado de sufrimiento.
Respecto a Chile, el artículo 16 de la Ley de Derechos y Deberes de los Pacientes ofrece un servicio de interrupción de tratamientos terminales con opción a paliativos y cuidados familiares. En el caso de este país, la legislación sobre la eutanasia se encuentra bajo consideración del Senado desde el pasado 12 de septiembre.
La eutanasia no es un procedimiento legal en México según el Código Penal Federal, cuya actividad es considerada homicidio por piedad o suicidio asistido. Sin embargo, la Declaración de Voluntad Anticipada permite a los pacientes de enfermedades terminales decidir sobre continuar con los tratamientos y otros cuidados para prolongar sus vidas.
El pasado 5 de diciembre de 2019, el Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores en México (INAPAM) informó que la voluntad anticipada responde a la necesidad de garantizar la muerte digna en el país. Comparada con la eutanasia, esta iniciativa tiene un enfoque preventivo, mismo que puede ser firmado por cualquier ciudadano mexicano de manera independiente a su condición de salud.
Tras la aprobación de esta iniciativa en Chiapas el 27 de agosto, e impulsada por la diputada Getsemaní Moreno Martínez, la voluntad anticipada aplica en 15 entidades de la República Mexicana. De acuerdo con los documentos de gobernación consultados por NotiPress, esta ley se permite en la Ciudad de México, Aguascalientes, Coahuila, Colima, Estado de México, Guanajuato, Guerrero, Hidalgo, Michoacan, Nayarit, Oaxaca, San Luis Potosí, Tlaxcala, Yucatán.