Muere el papa Francisco a los 88 años de edad

 21-04-2025
Axel Olivares
   
Portada | Internacional
Foto: IG @franciscus

Foto: IG @franciscus

El papa Francisco, primer pontífice latinoamericano y figura clave en las reformas contemporáneas de la Iglesia católica, falleció a los 88 años, anunció oficialmente el Vaticano. La noticia fue confirmada la mañana del lunes 21 de abril por el cardenal Kevin Farrell, camarlengo del Vaticano, quien informó que el papa murió a las 7:35 a.m. "regresó a la casa del Padre. Dedicó toda su vida al servicio del Señor y de su Iglesia", indicó el comunicado.

Su deceso sorprendió a la comunidad internacional, ya que el pontífice había realizado una aparición pública el domingo anterior, durante la tradicional bendición de Pascua desde el balcón de la basílica de San Pedro, tras recibir el alta hospitalaria días antes. A pesar de mostrar señales de debilidad, logró saludar a los fieles congregados en la plaza de San Pedro.

Con la muerte de Francisco se abre el llamado "interregno papal", periodo entre pontificados que inicia con nueve días de luto, denominados Novendiales. Durante este lapso se celebrarán misas diarias en su honor, y su cuerpo será exhibido en la basílica de San Pedro. El funeral deberá celebrarse entre el cuarto y sexto día tras su fallecimiento.

Posteriormente, los cardenales menores de 80 años se reunirán en el Vaticano para el cónclave, en el que se elegirá al sucesor de Francisco. Este proceso puede extenderse hasta por tres semanas, dependiendo del consenso entre los cardenales.

Nacido como Jorge Mario Bergoglio en Buenos Aires en 1936, Francisco fue el primer papa jesuita y latinoamericano. Durante su pontificado, se caracterizó por impulsar una visión reformista de la Iglesia, enfrentando fuerte resistencia interna. Promovió el acercamiento a los más vulnerables, denunció la corrupción financiera vaticana y estableció normas para combatir los abusos sexuales clericales, además de apoyar una mayor inclusión de las mujeres en tareas eclesiásticas.

En el ámbito internacional, buscó tender puentes con el mundo musulmán, y se pronunció sobre temas globales como la migración, la guerra y el cambio climático. También fue el primer papa en permitir que los sacerdotes ofrecieran bendiciones a parejas del mismo sexo.

No obstante, sus propuestas encontraron oposición entre sectores conservadores que rechazaban cualquier cambio a la doctrina tradicional. En sus últimos días, el papa continuó con sus funciones. Visitó una prisión en Roma el Jueves Santo y participó brevemente en los eventos litúrgicos de Semana Santa. Su última aparición fue durante la bendición urbi et orbi, donde fue asistido en la lectura de su mensaje.

La última reunión oficial fue con el vicepresidente de Estados Unidos, JD Vance, quien fue el último dignatario extranjero en reunirse con él. Además, estuvo presente junto a una multitud que lo vitoreaba en la plaza de San Pedro desde el papamóvil. Esta fue la primera vez que lo hacía desde su hospitalización.




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