Ciudad de México,
Noelia Acuña
Crédito foto: Sergio F Cara (NotiPress/Composición)
Hasta hace unos años, "Tun tun, ¿quién es? ¡Gente de paz!", era solo una línea de un popular villancico venezolano. Recientemente, el presidente Nicolás Maduro dio un nuevo significado a estas palabras con la "Operación Tun Tun", en respuesta a las manifestaciones y a la oposición tras las elecciones presidenciales del 28 de julio de 2024.
En ese sentido, Gonzalo Himiob, de la ONG Foro Penal, describió esta operación no formal como una escalada represiva en Venezuela. Tras las recientes elecciones, el Consejo Nacional Electoral (CNE) proclamó a Maduro ganador con el 51,2% de los votos sin presentar actas donde se respalden estos resultados, argumentando un supuesto hackeo informático.
Por su parte, la oposición liderada por Edmundo González Urrutia y María Corina Machado, aseguran que en las actas, González obtuvo el 67% de los votos, poniéndole fin a los 25 años de chavismo en el poder. Diversos países de la región, incluyendo Estados Unidos, consideraron a González como el legítimo ganador, mientras otros, como Brasil, México y Colombia, exigen transparencia en la publicación de las actas electorales.
Así, Maduro trasladó la disputa al Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), que no es reconocido por la oposición, para resolver los resultados de las elecciones. El 29 de julio, un día después de las elecciones, se desencadenaron protestas en los barrios populares de Venezuela debido a los resultados oficiales.
Paralelamente, el régimen de Nicolás Maduro comenzó con una serie de detenciones masivas, que familiares y organizaciones de derechos humanos califican como arbitrarias. Esto está generando un clima de miedo en el país, llevando a las personas a evitar las redes sociales, borrar chats, no llevar teléfonos y no salir de sus casas. Sin embargo, en 2017, Diosdado Cabello mencionó por primera vez la "Operación Tun Tun" en su programa de televisión para referirse a la detención de "terroristas".
Recientemente, esta operación se institucionalizó y lleva detenidas a más de mil personas en solo una semana, según indicó Foro Penal. Valentina Ballesta, de Amnistía Internacional, afirmó que nunca antes se había visto una represión tan intensa en Venezuela. Asimismo, el régimen de Maduro ha detenido a más de 2 mil personas, atribuyendo las protestas a un intento de "golpe de Estado" por parte de la "derecha fascista".
Asimismo, anunció la creación de dos cárceles de máxima seguridad. El Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (CICPC) es uno de los principales cuerpos de seguridad a cargo de estas detenciones. De los detenidos, la mayoría son jóvenes entre 21 y 23 años, y entre ellos hay 91 adolescentes. No obstante, la ley de odio vigente en Venezuela es muy amplia y permite que cualquier persona denuncie a otro bajo el concepto de odio.
Maduro enfrenta ahora una investigación por parte de la Corte Penal Internacional por posibles crímenes de lesa humanidad, incluyendo detenciones arbitrarias y torturas. Foro Penal señaló numerosas irregularidades en la "Operación Tun Tun", como detenciones sin orden judicial, falta de acceso a abogados de confianza y audiencias realizadas en centros de reclusión.
Además de las detenciones masivas, la "Operación Tun Tun" afecta a activistas políticos y defensores de derechos humanos. Uno de ellos fue el caso del exdiputado opositor Freddy Superlano, quien fue detenido recientemente junto con dos colaboradores. También, la anulación de pasaportes se convirtió en una práctica sistemática para limitar la movilidad de activistas y periodistas.
Concluyendo, la represión genera miedo entre la población venezolana, llevándola a muchos a adoptar medidas de seguridad y a vivir en constante temor. El régimen de Nicolás Maduro continúa negando los cargos y sostiene que las medidas son necesarias para mantener el orden y la seguridad en Venezuela.