
Foto: Sergio F Cara (NotiPress/Composición)
Un documento confidencial del Centro de Fusión de Tennessee, revisado por WIRED, revela que grupos catalogados como "extremistas violentos domésticos" participaron en robos recientes de tecnología militar en Estados Unidos. El texto describe cuatro intrusiones en arsenales de la Guardia Nacional de Tennessee durante siete semanas, con sustracción de dispositivos de visión nocturna, localizadores láser y miras térmicas.
Los reportes señalan indicios de colaboración interna en varios incidentes registrados en Tennessee. En Covington, Tennessee, las investigaciones hallaron evidencias de conocimiento previo sobre la ubicación de llaves de seguridad. Un coordinador antiterrorista, citado en el documento, advirtió: "Estos hechos son preocupantes no solo porque los artículos robados son de naturaleza sensible, sino también por los indicadores de que se necesita algún conocimiento de información privilegiada para el éxito de la violación y el robo".
Autoridades militares y federales supervisan las pesquisas sobe recientes robos en instalaciones militares. La Oficina del Preboste General del Pentágono está al tanto de los casos y una fuente policial indicó a WIRED cómo el FBI dirige las acciones, sin que la agencia lo confirme oficialmente. Los registros analizados incluyen comunicaciones entre miembros de milicias y simpatizantes que planificaron accesos a instalaciones con el propósito de obtener material pesado y sistemas de comunicación segura.
Entre 2020 y 2024, el FBI identificó cuatro personas interesadas en asaltar armerías para obtener armas de gran calibre y equipamiento especializado. Una conversación en la red social Telegram muestra a un usuario vinculado a una milicia solicitando ayuda de bomberos y personal militar para evaluar vulnerabilidades en armerías.
Las sustracciones en Tennessee se suman a incidentes ocurridos en otras partes del país. Este año se reportó el robo de tres vehículos Humvee y diversos equipos en un centro de la Reserva del Ejército en California. En Colorado, se forzaron contenedores de almacenamiento de la Guardia Nacional y en Washington, sospechosos veteranos intentaron sustraer chalecos antibalas y radios.
Así, la conexión entre grupos extremistas y tecnología militar no es nueva. Históricamente, arsenales estadounidenses han sido objetivo de intrusiones con fines de obtener armamento y dispositivos estratégicos. El documento indica que el interés de los DVE incluye radios seguras, equipos con información clasificada y elementos con aplicaciones tácticas, además de armas convencionales.
Luke Baumgartner, ex oficial del Ejército e investigador en la Universidad George Washington, señaló que los robos en Tennessee presentan características de operaciones con ayuda de personal interno. Subrayó que parte del material sustraído requiere autorizaciones específicas para su manipulación.
Finalmente, las autoridades de Tennessee registraron, en la última década, al menos 25 reportes de actividades sospechosas relacionadas con intentos de vigilancia o acceso no autorizado a instalaciones. Los incidentes recientes refuerzan la necesidad de mantener vigilancia sobre los arsenales y reforzar medidas de control para prevenir accesos no autorizados a material sensible.
DESCARGA LA NOTA SÍGUENOS EN GOOGLE NEWS