Foto: Wiki Commons
Motivado por la propuesta del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés), el grupo financiero BBVA anunció que dejará de financiar a empresas del carbón. Según su actualización del Marco Medioambiental y Social de BBVA, la institución bancaria reducirá a cero su exposición a actividades relacionadas con el carbón. Para esto se plantea dejar de financiar a empresas vinculadas con estas actividades, antes de 2030 en los países desarrollados y antes de 2040, en el resto de los países donde BBVA está presente.
Específicamente, BBVA dio a conocer que detendrá el financiamiento a clientes cuyas actividades basadas en carbón representen más del 5% de sus ingresos. De acuerdo al grupo financiero, las empresas con ingresos del carbón por encima de este umbral sólo podrán recibir financiamiento para proyectos de energías renovables y sostenibles. Este paso se completará durante 2021, informaron en un comunicado, con planes y objetivos para acompañar la descarbonización de sus clientes en sectores con emisiones intensas de dióxido de carbono.
Actualmente la IPCC recomienda limitar la subida de las temperaturas a un máximo de 1.5 grados Celsius y encaminar los esfuerzos globales hacia una economía neutra en carbono para 2050. Con esto en mente, BBVA se comprometió a alinear su cartera de crédito con los objetivos del Acuerdo de París en 2018. Desde entonces, dieron a conocer el 5 de marzo de 2021, el banco ha movilizado más de 50 mil millones de euros en financiación sostenible, durante los últimos tres años. Esto los pone por delante en su objetivo de movilizar 100 mil millones de euros, para este fin, entre 2018 y 2025, afirman.
Según un nuevo reporte de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), las promesas de reducción de carbono de los países no se acercan a los objetivos del Acuerdo de París. Hasta ahora, las promesas del mundo sólo son suficientes para reducir las emisiones globales de dióxido de carbono a menos del 1%, por debajo de los niveles de 2010 para 2030. Para lograr el objetivo oficial más estricto del acuerdo de París, de limitar el calentamiento futuro a 0.3 grados Celsius a partir de ahora, es necesario reducir la contaminación por carbono en un 45% por debajo de los niveles de 2010, señaló el organismo.
Debido a la pandemia de Covid-19, se registró en 2020 una reducción récord de las emisiones de dióxido de carbono. Según un artículo publicado en la revista científica Earth System Science Data, el confinamiento causó una disminución estimada de 2.4 mil millones de toneladas durante 2020. No obstante, los investigadores temen una reaceleración de las emisiones durante 2021 y en años siguientes, debido a las acciones para estimular la economía global en respuesta a la pandemia de Covid-19. Entre los peligros del cambio climático destacan un aumento en las inundaciones de las viviendas de bajos ingresos y otros efectos catastróficos en las migraciones.
Considerando estos y otros peligros, muchas empresas y organismos empiezan a implementar políticas como la de BBVA, de dejar de financiar empresas relacionadas con el carbón. Aunque mundialmente se deben reducir las emisiones de carbono, ciertamente el esfuerzo debe ser mayor en los principales países contaminadores de carbono: Estados Unidos, China e India.
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