Foto: Foto de Daria Shevtsova en Pexels
El marketing de influencers se ha presentado como una opción viable para las marcas, sobre todo luego de una mayor migración digital por la pandemia de Covid-19. De acuerdo con Hivency, la industria de la influencia tendrá un valor de 15 millones de dólares para 2022. Con el éxito de esta estrategia en mente, la posibilidad de trabajar con micro o nanoinfluencers puede resultar lo ideal para pequeñas marcas que buscan un público local.
Luego de la pandemia de Covid-19, gran parte de los negocios e industrias tuvieron que migrar al entorno digital por las medidas sanitarias y el confinamiento. Sin embargo la transformación no fue tan sencilla para los pequeños negocios o marcas, los cuales sufrieron gran parte de los estragos por la subsecuente crisis económica.
Como parte de las estrategias de marketing que estas marcas pueden implementar para mejorar las ventas o el reconocimiento online, trabajar junto con influencers de cualquier red social podría ayudar. Los nanoinfluencers son influencers con mil a 10 mil seguidores, mientras que los microinfluencers tienen 10 mil a 50 mil seguidores en cualquier área o red.
La ventaja de trabajar con influencers que tienen relativamente pocos seguidores es su alcance, el cual se plantea como algo más próximo de las comunidades y cercano por sus interacciones. Según Planoly, los nanoinfluencers obtienen 7% de tasa de participación, la más alta de cualquiera, y representan el 85% de los influencers en plataformas, es decir, hay 3 nano por cada macroinfluencer.
Gran parte de las dinámicas presentes hacia estas personalidades tienen mayor aceptación y confianza por parte de sus seguidores. A diferencia de macroinfluencers, estos mantienen una relación cercana, donde gran parte del contenido publicado es sugerido por los seguidores. Así, las marcas pueden aprovechar una buena relación para llegar a audiencias específicas y locales, seguras de que la confianza en esta figura pública será para el producto.
Otra utilidad resultante del trabajo conjunto es el menor costo, si el 45% de los macroinfluencers buscan una compensación económica, los nano prefieren un intercambio de productos o servicios. Asimismo, pueden crearse buenas y duraderas relaciones entre marcas y nanoinfluencers con beneficio mutuo.
Si bien es difícil encontrar un nano o microinfluencer que vaya con los valores de marca o esté cercano a la comunidad objetivo, hallarlo marcaría grandes beneficios a los negocios. Ante las dificultades de la migración digital, el trabajo con influencers permitiría mayor reconocimiento de marca así como ganar consumidores de gran fidelidad.
DESCARGA LA NOTA SÍGUENOS EN GOOGLE NEWS