Ciudad de México,
Axel Olivares
Crédito foto: Patricia Manero (NotiPress/Composición)
Un nuevo medio de transporte podría estar naciendo, solo que este sería plenamente natural. Se trata de los asteroides que pasan cerca de la Tierra. Dos científicos de la Universidad Nacional Taras Shevchenko de Kiev, en Ucrania, propusieron utilizar estos cuerpos espaciales para emprender viajes al interior de los llamados "Neo", objetos cercanos a la Tierra. Uno de los beneficios es que, al utilizar los asteroides como transporte, los astronautas se protegerían de la radiación cósmica.
De acuerdo con los detalles publicados en ArXiv, los altos niveles de radiación procedentes del Sol y los rayos cósmicos son los principales obstáculos de los astronautas para emprender viajes largos al espacio. Por lo tanto, una solución sería viajar en el interior de un asteroide.
"Es más barato utilizar material que ya flota en el espacio", declara Arsenii Kasianchuk, autor del estudio junto con Volodymyr Reshetnyk. Ambos analizaron las órbitas de hasta 35 mil asteroides cercanos a la Tierra para ver si alguno podría ser utilizado para misiones interplanetarias para los próximos 100 años. Entre los asteroides investigados, se buscaron los más cercanos a la Tierra, a Marte y a Venus, para que una nave espacial pueda aterrizar y despegar fácilmente.
Entre los 120 candidatos, algunos pasaron por los tres planetas de manera bastante regular, y otros fueron menos frecuentes. El plan sería que, si un astronauta quiere por ejemplo viajar de la Tierra a Marte, aborde un asteroide que lo dirija a ese planeta, y luego esperar otro asteroide para regresar.
Los científicos calcularon que, en 2079, un asteroide pasará de la Tierra a Venus y Marte en 230 días y volverá en sentido contrario en 2080. Esto ofrece la oportunidad de visitar ambos planetas en una sola misión.
Si bien la idea suena fascinante, requiere todavía de varios estudios para superar los diferentes desafíos como igualar la velocidad del asteroide para aterrizar en su superficie o encontrar la manera de insertar una nave espacial dentro del asteroide. Tanto Kasianchuk como Reshetnyk sugieren que la solución a este último planteamiento podría ser lanzar primero un dispositivo que excave un túnel en el Neo y en el cual luego podría aterrizar la nave. A los científicos les queda aún mucho trabajo por hacer, pero los investigadores esperan que en los próximos años se puedan encontrar cada vez más asteroides que funcionen para utilizarse en viajes interplanetarios.