Ciudad de México,
Andrés Zimbrón
Crédito foto: Freepik
Un reciente informe publicado en la revista científica Science, señaló que las olas de calor severas y frecuentes son una amenaza para las futuras generaciones. En este sentido, los niños nacidos en 2020 podrían vivir hasta siete veces más olas de calor extremo, en comparación con quienes nacieron en 1960.
Esa es la disparidad generacional proyectada si las emisiones globales de gases efecto invernadero se reducen a la cantidad actualmente prometida por los gobiernos internacionales. Wim Thiery, científico climático de la Universidad de Bruselas en Bélgica, destacó que se espera un incremento de la temperatura terrestre hasta en 2,4 grados centígrados. En otras palabras, las futuras generaciones experimentarán un promedio de cuatro olas de calor extremo durante toda su vida.
Aunque hoy en día los gobiernos internacionales tratan de revertir la situación climática del planeta Tierra, la brecha generacional que los niños nacidos en 2020 experimentarán es inevitable. "Sí la humanidad logra limitar a solo 1,5° Celsius, las niñas y niños no se salvarán de un calor extremo en las próximas décadas", agregó Thiery.
La exposición a eventos extremos se vuelve aún mayor en ciertas partes del mundo, por ejemplo, en Medio Oriente los niños nacidos en 2020 experimentarán hasta 10 veces más olas de calor. Los resultados del estudio describen el panorama para las nuevas generaciones, así como la importancia de revertir y enfrentar el calentamiento global.
El cambio climático es el tema central del Acuerdo de París, que establece un marco global para mantener el calentamiento global muy por debajo de los 2,0 grados Celsius. Así también, aspira a reforzar la capacidad de los países para hacer frente a los efectos del cambio climático y apoyarlos en sus esfuerzos para alcanzar los objetivos.
Ante esa situación, los científicos y expertos del cambio climático amplifican las soluciones para reducir su impacto. "El calentamiento global está afectando a todas las regiones de la Tierra, desde sequías hasta inundaciones", puntualizó Kim Cobb, científico del clima en Georgia Tech en un artículo para Science.
Otros científicos argumentan que, de llegar a cero emisiones netas en décadas posteriores, las nuevas generaciones podrían tener indicios de mejorar la situación actual del planeta. En contraste, otra parte de la comunidad científica afirma que, la humanidad ya cruzó el umbral para detener el calentamiento global y sus consecuencias son irreversibles.
Con un panorama desalentador, las organizaciones en pro de frenar el calentamiento global afirman que la humanidad está en un momento crucial. Por tanto, encontrar soluciones para evitar las olas de calor y ser más estrictos con las acciones climáticas será el punto de inflexión para las nuevas generaciones.