Ciudad de México,
Álvaro Sánchez
Crédito foto: Mart Production en Pexels
Según una investigación de la Universidad de Boston, un 19% de las personas con claustrofobia no pueden llevar a cabo una resonancia magnética por el pánico durante la sesión. Inclusive, las personas que no padecen esta fobia llegan a sentirla durante dicho estudio, debido a lo reducido del espacio, el ruido del escáner, así como el movimiento y vibración de la mesa.
No obstante, existen diversas opciones para que personas claustrofóbicas puedan realizarse una resonancia magnética de forma adecuada en las cuales no se desencadenen ataques de ansiedad. Por ejemplo, la empresa Imtra en primer lugar recomienda buscar una resonancia abierta, con el fin de evitar la sensación de encierro. En segundo lugar señala; visitar el centro antes de la resonancia magnética será de mucha ayuda, ya que esto permite a los pacientes observar la máquina con anterioridad y disminuir sus niveles de nerviosismo. Finalmente, en el caso de menores edad con o sin este padecimiento, entrar acompañados de un adulto el cual les brinde seguridad y confianza será esencial.
Es importante mencionar, la claustrofobia se define como el miedo irracional a los espacios cerrados en lugares pequeños. Tanto hombres como mujeres de todas las edades pueden verse afectados por esta fobia y se necesita tratamiento terapéutico especializado para erradicarla o controlarla. Asimismo, también puede hacerse presente en ambientes con alto flujo de gente; conciertos, manifestaciones y demás eventos concurridos.
Ante esta problemática, investigadores han creado una nueva tecnología de realidad virtual que facilitaría realizar una resonancia magnética para pacientes con claustrofobia. Inclusive, se espera que con este desarrollo también se facilite dicho proceso en niños y personas con dificultades cognitivas
Para proporcionar a los pacientes un entorno de realidad virtual inmersiva, se utiliza un casco especial que se puede utilizar dentro del escáner de la resonancia magnética. El cual está diseñado para ser ajustado a la luz y el usuario no pueda ver el entorno y de esta manera, no sea consciente de los recordatorios visuales de su posición. Una vez el sistema está correctamente posicionado, el proyector se activa y brinda contenido de realidad virtual desde ese punto en adelante hasta terminar la resonancia magnética.
De esta manera se elimina la sensación de estar en una resonancia magnética, porque la escena visual se reemplaza por completo con el entorno de realidad virtual. Esto resulta funcional al crear congruencia con las sensaciones percibidas durante los exámenes de resonancia magnética, tales como el ruido del escáner, el movimiento de la mesa y la vibración de esta, por lo cual es un buen método para mitigar el miedo.
Actualmente, no existen otros sistemas como el de esta nueva tecnología de realidad virtual que faciliten realizar resonancias magnéticas a personas con claustrofobia. Por ello, los investigadores ahora se encuentran desarrollando contenido con el fin de expandir rápidamente su utilidad a distintas partes del mundo.