Foto: Sergio F Cara (NotiPress)
Decidir entre la red 5G o la banda ancha cableada es importante para las empresas en Latinoamérica. La tecnología 5G es valorada por su capacidad para ofrecer conectividad fiable más allá de las ubicaciones fijas y puede conectar flotas de vehículos, dispositivos IoT y empleados remotos en áreas donde la banda ancha cableada no es viable.
Según el Informe Global sobre el Estado de la Conectividad 2024 de Cradlepoint, más del 70% de los líderes empresariales encuestados en México planean implementar la tecnología 5G como una prioridad estratégica. En ese sentido, consideran que el 5G será crucial para IoT, mejoras en la cadena de suministro, inteligencia artificial y aprendizaje automático, así como para iniciativas de sostenibilidad.
A pesar de los beneficios, la adopción de la tecnología de red 5G presenta ciertos desafíos. La necesidad de una protección segura es importante, especialmente cuando el informe reveló que casi un tercio (29,1%) de los líderes empresariales en México mencionan la seguridad como la principal barrera para adoptar la tecnología 5G.
En este contexto, el modelo de ciberseguridad Secure Access Service Edge (SASE) se está convirtiendo en un estándar en seguridad informática. SASE, basado en la nube, asegura redes corporativas modernas que requieren simplicidad, flexibilidad, baja latencia y seguridad en el borde de la WAN.
Aunque la flexibilidad de la WAN 5G es tentadora, las empresas deben comprender cómo difiere de la WAN cableada. La WAN 5G introduce un componente móvil, permitiendo conectividad WAN móvil para diversas organizaciones, desde pequeñas empresas con vehículos de reparto hasta entidades de seguridad pública con flotas de emergencia.
La conectividad WAN a través de redes celulares carece de enlaces físicos, y puede complicar la resolución de problemas sin las herramientas adecuadas de visibilidad. Por ello, la combinación de 5G y SASE resulta básica, ya que puede ofrecer una red ágil y segura. Para cualquier organización, es fundamental integrar la tecnología más avanzada con robustas características de seguridad.
Pero, la WAN 5G no es la excepción por el hecho de que, la combinación de 5G y SASE proporciona seguridad y expansión a nuevas áreas, protegiendo dispositivos móviles y datos, incluso fuera de la oficina. Si bien las capacidades del 5G continúan evolucionando, las redes 5G autónomas avanzan hacia una segmentación más amplia. Esto se traduce en una estrategia integral donde se combina 5G y SASE y puede garantizar eficiencia y seguridad para las redes actuales y futuras.
No obstante, si las empresas en Latinoamérica tienen que elegir entre 5G y banda ancha cableada eso dependerá de las necesidades específicas. La banda ancha cableada ofrece estabilidad y seguridad en áreas urbanas con infraestructura existente, mientras que el 5G proporciona flexibilidad y movilidad. Sin embargo, la combinación de 5G con soluciones de seguridad como SASE puede ser la clave para una conectividad empresarial segura y eficiente.
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