Ciudad de México,
Axel Olivares
Crédito foto: Sergio F Cara (NotiPress/Composición)
De acuerdo con un informe publicado por The Lancet, mas de 39 millones de personas morirán entre 2024 y 2025 por infecciones resistentes a los antibióticos. Esta teoría se desprende de los datos recolectados que indican que entre 1990 y 2021, más de un millón de personas murieron cada año por infecciones resistentes a los medicamentos. Por lo tanto, esta cifra podría aumentar a casi 2 millones por año hasta 2050.
El informe estima que se podrían salvar alrededor de 92 millones de vidas entre el periodo previsto con un acceso más amplio a los antibióticos adecuados y un mejor tratamiento de las infecciones. "Esta es una contribución importante para comprender cómo hemos llegado hasta dónde estamos y para brindar una expectativa racional de la carga futura de [resistencia] con el fin de informar los próximos pasos que se pueden emprender", asegura Joseph Lewnard, epidemiólogo de la Universidad de California, Berkeley.
Por otro lado, Timothy Walsh, microbiólogo de la Universidad de Oxford, considera que "las cifras de la carga son probablemente mucho más altas que las que se han informado aquí". De todos modos, las cifras no estarían cumpliendo el objetivo de Naciones Unidas de reducir la mortalidad causada por la resistencia a los antimicrobianos para 2030.
Los investigadores estudiaron los datos de 204 países entre 1990 y 2021, centrándose en 22 patógenos, 84 combinaciones de bacterias y medicamentos a los que son resistentes y 11 enfermedades, incluidas infecciones de la sangre y meningitis. Los estudios revelaron que, aunque el número de mortalidad en niños menores de 5 años causado por infecciones resistentes a los medicamentos disminuyó en más del 50% en las últimas tres décadas, las tasas de mortalidad en personas mayores de 70 años aumentaron en un 80%.
Entre las infecciones más letales se encuentran las bacterias gramnegativas. Esta categoría incluye Escherichia coli y Acinetobacter baumannii, un patógeno asociado con infecciones adquiridas en el hospital.
Las bacterias gramnegativas son resistentes a los fármacos carbapenémicos, una clase de antibióticos utilizada para tratar infecciones graves, y pueden intercambiar genes de resistencia a los antibióticos con especies diferentes. Las muertes relacionadas con bacterias gramnegativas resistentes a los carbapenémicos aumentaron un 149,51%, de 50.900 casos en 1990 a 127.000 casos en 2021.
Además, para 2050, el informe indica que la resistencia a los antimicrobianos podría causar 1,91 millones de muertes cada año y que otros 8,22 millones de personas mueran por enfermedades asociadas a la resistencia. Más del 65% de las muertes atribuidas a la resistencia a los antimicrobianos en 2050 corresponderán a personas mayores de 70 años.
La investigación mostró que las regiones con las tasas de mortalidad previstas más altas son el sur de Asia, América Latina y el Caribe. A su vez, los investigadores enfatizan que cualquier estrategia para abordar la resistencia a los medicamentos debe priorizar a los países de ingresos bajos y medios.
"Necesitamos más inversión global y mucho más compromiso interactivo real con los países de bajos ingresos para asegurarnos de que estén equipados", asegura Walsh. Además, añade que las estrategias deben garantizar que los hospitales de los países de bajos ingresos tengan acceso a herramientas de diagnóstico, antibióticos, agua potable y saneamiento, entre otras cosas.
Para esto, Walsh asegura que se debe abordar el uso excesivo de antibióticos en la agricultura, que acelera la resistencia bacteriana. Por lo tanto, el informe es un pedido a las autoridades para desarrollar nuevos medicamentos teniendo en cuenta estas consecuencias.