Ciudad de México,
Andrés Zimbrón
Crédito foto: Alan Cortés (NotiPress)
Una investigación realizada por el Departamento de Medicina de Emergencia Health and Science University de Oregon reveló que al año ingresan 1 millón 100 mil menores de edad a urgencias por suicidio. Esta situación ha alarmado a las autoridades en Estados Unidos, pues uno de cada 5 preadolescentes reportaron un patrón de conducta suicida previo.
De acuerdo con David Sheridan, coautor del estudio, el objetivo fue examinar los patrones específicos de edad en las acciones suicidas utilizando una base de datos representativa a nivel nacional. "Nuestra hipótesis es que los intentos de suicidio en menores de edad ha aumentado en el país", subrayó en un artículo publicado en JAMA Network Pediatría.
Los investigadores capturaron información desde el 1 de enero de 2000, hasta el 31 de diciembre de 2020 del Sistema Nacional de Datos de Envenenamiento Estadounidense (NPDS, por sus siglas en inglés). El análisis incluyó a menores de edad de entre 6 a 18 años de edad clasificando los suicidios en tres opciones: sospecha de suicidio intencional, uso indebido intencional, abuso intencional.
Aunado a ello, el estudio se subdividió con base en el manual de codificación NPDS, es decir, ningún efecto, efecto menor, efecto moderado y efecto mayor o de muerte. En total se registraron 1 millón 256 mil 963 casos únicos donde 854 mil 411 fueron mujeres (68,0%) y 401 mil 621 fueron hombres (32,0%) con una edad media de 15 años.
Según los resultados, se registraron mil 5 muertes y el 28,7% vinculadas con efectos mayores o de muerte en comparación a otras clasificaciones. La acción por mal uso de sustancias se mantuvo en una media constante durante el periodo de estudio de 20 años. Todos los grupos mayores a 9 años mostraron un aumento en intenciones suicidas, pero el cambio en edades de 10 a12 fue el más significativo tras aumentar 4,5 veces más.
Para los científicos, esta tendencia en aumento no está del todo clara, pero las redes sociales y retos en ellas pueden tener una influencia en las cifras. Asimismo, todo lo que se publica en las redes sociales, el contenido en televisión y la depresión coinciden en el rango de edad adolescente.
Otros aspectos importantes son las expectativas aspiracionales de vida que puede haber en los medios tradicionales e Internet. "Los contenido no aptos para edades específicas también puede estar influyendo en las tendencias suicidas en menores", se puede leer en el estudio.
Actualmente, el grupo de investigadores se mantiene trabajando en los datos recabados y aún faltan más incógnitas por resolver. Sin embargo, se ha abierto una puerta para poner atención en las cifras que ponen de manifiesto las intenciones de intoxicarse intencionalmente para suicidarse. Este aspecto es esencialmente importante, porque muestra la necesidad de la sociedad en general para identificar a temprana edad rasgos suicidas.