Ciudad de México,
Martín Olivera
Crédito foto: Gustavo Torres (NotiPress)
El programa "Buenos Días RD" dedicó un segmento a analizar el etiquetado frontal en productos alimenticios, destacando su potencial educativo en el entorno familiar. El cardiólogo Samuel Ramos explicó que esta herramienta "es un octágono negro con letras blancas, bien definido, que te informa si ese producto sobrepasa los niveles permitidos por la Organización Mundial de la Salud". La medida ya es utilizada por otros países como México y Chile.
No detalla cifras nutricionales el etiquetado frontal, sino que actúa como advertencia visible sobre niveles críticos de azúcar, sal, grasas, edulcorantes, cafeína o calorías. "Esto no es una información cuantitativa, sino cualitativa", aclaró Ramos, quien indicó que la señalización busca orientar las decisiones de compra de los consumidores, en especial las de padres y tutores.
Durante la conversación desde República Dominicana, se abordó cómo las campañas escolares pueden impactar en el hogar. "Va mami, pero en la escuela me dijeron que eso hace daño y tú me está trayendo eso", expresó Ramos, al referirse al posible cuestionamiento de menores ante productos con etiquetas de advertencia. Afirmó que este diálogo podría fomentar mayor conciencia alimentaria entre adultos.
Ramos destacó que, al estar respaldado por la evidencia, este etiquetado no solo orienta al consumidor, sino que también incentiva a la industria a modificar sus fórmulas. "La industria lo que hace es que reformula su producto y ya entonces tiene el derecho a anunciarse de esa manera", explicó el cardiólogo.
En República Dominicana, el proyecto legislativo sobre etiquetado frontal está permitido desde 2019, conocido por la NORDOM 53. Sin embargo, el Ministerio de Salud Pública avanza en una resolución administrativa. "Si la industria de alimentos no emite opiniones relativas a esa resolución antes del 30 de abril, entonces ya el Ministerio de Salud está obligado a promulgar esa resolución", aseguró el cardiólogo.
Ramos explicó que tras su publicación, la industria contará con 180 días para aplicar la normativa a los alimentos preenvasados. "No para comenzar a hacer los cambios sino que cualquier producto que salga a partir de esa fecha sea retirado del mercado si no cumple con esos requisitos", advirtió.
El especialista también hizo énfasis en el programa, la urgencia de incluir a pediatras y centros educativos en la diseminación de esta información. "La misma ley debe tener consigo una obligación de educación a la comunidad", dijo Ramos, al insistir en que el conocimiento puede generar cambios significativos en el consumo familiar.
Finalmente, señaló que esta medida se implementó en países como Chile y México. "México quizás es el país que está levantando mayor evidencia ahora mismo en América Latina", puntualizó, al referirse al etiquetado frontal.