Ciudad de México,
Patricia Manero
Crédito foto: Sergio F Cara (NotiPress/Composición)
La equidad de género y la inclusión son temas cada vez más relevantes, el Día Internacional del Hombre ofrece la oportunidad para reflexionar sobre la diversidad y complejidad de la experiencia masculina. Lejos de los estereotipos tradicionales, este día destaca la importancia de reconocer y apreciar las diversas identidades y roles que los hombres desempeñan en la sociedad moderna.
Inaugurado en 1999 en Trinidad y Tobago, el Día Internacional del Hombre se extendió a otros países con la idea de generar un balance entre géneros. Entre los pilares que rigen este día se encuentra promover modelos masculinos positivos; celebrar las contribuciones positivas de los hombres a la sociedad, comunidad, familia, matrimonio, cuidado de niños y el medio ambiente, así como centrarse en la salud y el bienestar social, emocional, físico y espiritual de los hombres.
Los hombres también están presionados por seguir ciertos patrones de conducta que marca la cultura dominante. Conceptos como la autoafirmación o la fuerza física parecen ser intrínsecos del ser hombre en la sociedad moderna. De acuerdo con la Coordinación de Igualdad de Género de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), repensar las formas de ‘ser’ hombre es una tarea urgente. NotiPress recopiló testimonios de hombres en la Ciudad de México, quienes contaron cómo los estereotipos de género afectaron su vida y la forma en la cual los están desafiando.
"Cuando empecé a pintarme el cabello y a dedicar más tiempo en mi arreglo personal, mi familia me dijo que eso no era de hombres", cuenta Alexis en entrevista con la agencia de noticias. "En un principio, me sentí humillado y luego me di cuenta de que eran pensamientos arraigados que no debían marcar mi forma de vida. Ahora dedico un tiempo en mi día a día para mi arreglo personal".
Otro estereotipo marcado en la sociedad es que los hombres deben de ser los proveedores económicos del hogar. En una charla con Javier, contó cómo sus allegados lo criticaron porque su pareja es la que provee económicamente a la familia, y él es quien se queda en casa. "Es algo que nos ha funcionado a mi pareja, a mi familia y a mí, pero al mismo tiempo nos ha afectado por cómo nos ven los demás. Cuando le preguntan a mi hijo '¿en qué trabaja tu papá?' y él contesta que me quedo en casa, ha recibido burlas y maltrato", cuenta Javier.
Los estereotipos de género también afectan a la salud física y mental de los hombres. Respondiendo a la autoafirmación y al pensamiento de que "un hombre no debe mostrarse vulnerable", menos hombres buscan ayuda psicológica. Estudios sobre el tema informan, la cifra de mujeres que acuden a terapia es bastante mayor (68,9%) que la de hombres (31,1%).
Por otro lado, la masculinidad es un problema al detectar, por ejemplo, el cáncer de próstata, pues muchos hombres asocian la enfermedad con disfunción sexual e incontinencia urinaria. Además, muchos sienten rechazo a la prueba del tacto rectal, lo cual motiva el silencio en torno a la enfermedad.
Eleni Efsathiou, oncóloga genitourinaria del Hospital Houston Methodist explicó a NotiPress que los hombres deben dejar atrás estigmas y tabúes a fin de enfrentar esta patología. "Es importante desmitificar el cáncer de próstata, y una atención a tiempo puede ser la diferencia, pues en ocasiones esta patología es asintomática", subrayó.
El siglo XXI ha traído una evolución de los roles paternos y muchos padres modernos están optando por ser más participativos en la crianza de sus hijos. El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) establece que ser un padre activo y responsable se define al tener una relación afectuosa con sus hijos, así como mantener una relación más allá de lo económico. Por otra parte, asegura que es clave ser partícipe y actor del cuidado diario y la crianza de sus hijos con actos como alimentarle, dormirle, vestirle, asegurarle actividades de recreación y participar en su educación.
El Día Internacional del Hombre es mucho más que una simple celebración; es una oportunidad para reflexionar sobre cómo la sociedad percibe y valora la masculinidad. Al desafiar los estereotipos, apoyar la salud integral y reconocer la diversidad en todas sus formas, estamos dando pasos importantes hacia la construcción de un mundo más inclusivo y equitativo para todos.