Foto: Gustavo Torres (NotiPress)
El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) criticó la presencia de infiltrados en las manifestaciones del 8M por el Día Internacional de la Mujer, señalando que se concentraron en causar daño a dos edificios significativos para generar "más daño y escándalo". AMLO hizo hincapié en que, a diferencia de eventos previos, esta vez la catedral fue un foco principal.
A pesar de los incidentes, el mandatario agradeció que la mayoría de la manifestación se llevó a cabo de forma pacífica, reafirmando su creencia de que "la paz es lo más eficaz" y que "no se puede enfrentar la violencia con la violencia". Estas declaraciones se dan en el marco de ataques anteriores al Palacio Nacional, incluyendo la manifestación por los normalistas desaparecidos de Ayotzinapa, donde una puerta del palacio fue derribada.
Sin embargo, el uso de gas lacrimógeno en el Zócalo capitalino para dispersar a los manifestantes cerca de la Catedral y Palacio Nacional contradice la narrativa de una protesta pacífica. Además, se reportaron casos de violencia policial en diferentes entidades del país, como en Zacatecas, donde una confrontación entre activistas y policías resultó en la detención de 14 mujeres, quienes posteriormente fueron liberadas. Rodrigo Reyes Mugüerza, secretario de Gobierno de Zacatecas, defendió los arrestos, alegando que las manifestantes mostraron una conducta violenta. Estos eventos han suscitado un debate sobre la respuesta de las autoridades y el derecho a la protesta pacífica.
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