Ciudad de México,
Judith Moreno
Crédito foto: Alan Cortés (NotiPress/Composición)
El impuesto a videojuegos con contenido violento, contemplado en el Paquete Económico 2026, no será aplicado. La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, anunció esta decisión durante la conferencia matutina del 23 de diciembre, al confirmar que no existen condiciones operativas para poner en marcha esta disposición fiscal.
Durante su intervención, Sheinbaum explicó que el gravamen permanecía incluido en la Ley de Ingresos, aunque su administración ya había solicitado su retiro. La propuesta original establecía una tasa del 8% dirigida a videojuegos clasificados para adultos, incluyendo ventas físicas, digitales y servicios por suscripción.
Frente a medios acreditados, la presidenta sostuvo que la implementación resultaría inviable por dificultades para identificar con precisión los títulos sujetos al nuevo impuesto. "Es muy difícil distinguir entre un videojuego que tiene violencia y uno que no", declaró desde Palacio Nacional.
Claudia Sheinbaum en el Palacio Nacional el 23 de diciembre. Fuente: Gobierno de México
La Secretaría de Hacienda había planteado la creación del gravamen con base en lineamientos del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS). Además de la venta inicial, se preveía incluir contenido descargable, mejoras dentro del juego y funciones especiales. Distribuidores nacionales y plataformas extranjeras tendrían la obligación de registrar operaciones ante el Servicio de Administración Tributaria (SAT) y facturar el impuesto dentro del precio final.
Sin embargo, la presidenta informó que tras un nuevo análisis, la medida será eliminada del marco tributario. Aclaró que, en lugar del gravamen, el gobierno impulsará una estrategia de comunicación pública con orientación social. "Decidimos mejor que el tema de los impuestos se quite porque tiene muchas complicaciones y realmente que haya una campaña orientada a la construcción de la paz", afirmó.
Otras disposiciones del paquete fiscal se mantienen sin modificaciones, entre ellas el aumento a impuestos en juegos con apuestas, tabaco y bebidas saborizadas. La propuesta tributaria fue diseñada para reforzar ingresos federales mediante ajustes en sectores con alto impacto en salud pública y regulación digital.
La reforma tributaria de videojuegos también contemplaba sanciones para plataformas que incumplieran las nuevas obligaciones, incluyendo restricciones de acceso al mercado nacional. Con la decisión del Ejecutivo federal, estos mecanismos no entrarán en vigor.
Así, el retiro del impuesto no afectará las obligaciones fiscales generales de las empresas distribuidoras de contenido interactivo. Las reglas vigentes relacionadas con IVA, ISR y retenciones digitales seguirán aplicándose conforme al marco normativo establecido en ejercicios anteriores.